No tu tambien...

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Ahí estaba yo, pidiendo de rodillas a dios que me arreglara.

Finalmente descubrí al monstruo que me atormentaba constantemente, era yo, no hay nadie que me haga sufrir todo esto mas que yo. Es inevitable creer al principio que tus problemas son por alguien mas, pero no es así, eso lo supe después de autodestruirme. Y no importa con cuánto apoyo cuente, mientras sea una chica tonta, inútil y estupida no podré arreglar nada...

Por favor Dios, eres mi única salvación, te lo pido, no me abandones, no tu también.

Indigno Donde viven las historias. Descúbrelo ahora