capitulo 14

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"Por última vez Rias, no quiero unirme a tu nobleza." La chica Ssid dejó escapar un fuerte gemido mientras se dejaba caer dramáticamente en su asiento en el mostrador de Naruto ante su oferta. Sentada frente a ella estaba una Koneko distraída que masticaba en silencio un plato lleno de galletas de azúcar.

"Pero podrías estar más cerca de Ko-" La chica fue detenida en medio de su oración cuando una galleta a medio comer golpeó su frente. La pelirroja giró sus ojos hacia su torre y vio al nekoshou dándole una pequeña mirada.

"No hagas eso." Koneko declaró justo cuando una pequeña servilleta enrollada golpeaba ligeramente su cara. Sus ojos se posaron en su novio que estaba ocupado cumpliendo con los pedidos de los clientes en la tienda.

"No desperdicies comida tirándola a la gente". Dijo Naruto sin levantar la vista de su trabajo. Koneko le ofreció al chico una suave disculpa antes de volverse hacia Rias justo a tiempo para ver a la chica soplándole una frambuesa.

El dúo de rey y torre se había acostumbrado a visitar la tienda de Naruto casi todos los días después de la escuela. El motivo de Koneko era, por supuesto, visitar y pasar un rato agradable con su novio. Rias, por otro lado, la intención principal era intentar reclutar al chico para su nobleza. Desde que vio su actuación en el juego de Ratings, la chica había sido implacable en su intento de llevar al chico a su lado.

Hablando de las acciones de Naruto, el asalto del rubio a varios demonios de nivel medio a alto y su interrupción de un juego de clasificación habían dejado al rubio en una situación bastante profunda en lo que respecta a los demonios. Lo mejor era decir que estaba en la lista de "buscados" de varios clanes de demonios. Sin duda, en la parte superior de esa lista estaba el clan Phenex. Cuando Lord Phenex se despertó con la noticia de que el compromiso había sido cancelado, no fue exactamente el más receptivo a la noticia. El hombre sintió que lo habían engañado y exigió que se revocara la decisión debido a la interferencia de Naruto en el partido. Desafortunadamente para él, Sirzechs no escuchó nada de eso. Para Satanás, su decisión ya estaba tomada y no iba a cambiar. Y con el respaldo de otros dos Satán, realmente no había nada que Phenex pudiera hacer.

Entonces, en cambio, el clan efectivamente había dado un golpe a Naruto. Debido a que el niño había dejado bastante claro que no estaba aliado a ninguna facción, el clan había emitido un premio por la muerte del niño. Tanto Rias como Koneko se pusieron furiosos cuando se enteraron de la recompensa, pero finalmente se calmaron.

Sirzechs había intentado llevar a Naruto al inframundo para llegar a algún acuerdo o alianza con el rubio. Si bien Satán sabía que no tenía una idea completa de la habilidad del niño, aún podía sentir el poder puro que contenía el shinobi. Ser el primero en aliarse con alguien con tal poder sólo sería una bendición para el poder del diablo. Desafortunadamente para el diablo, Naruto no estaba de acuerdo. El rubio dejó en claro que no quería involucrarse con los demonios. El sentimiento parecía ser mutuo ya que la mayoría de los demonios que participaron en la "lucha" contra el niño le guardaban un fuerte rencor y querían nada menos que trabajar junto a él.

"Vamosnnnnnn. Obtendrás increíbles poderes diabólicos, nadie en el inframundo podrá hacerte nada y eventualmente podrás obtener tu propio título de nobleza". La mirada de Rias se encontró con otra mirada inexpresiva por parte de la rubia. La chica soltó un suspiro antes de decidir detener sus intentos de reclutamiento por hoy. Quizás mañana sería un día mejor.

" Ese idiota de antes se está acercando a la tienda por cierto. " Naruto hizo una pausa momentánea en su acción ante el comentario de su compañero antes de continuar amasando el trozo de masa en su mano.

"Vas a tener que ser un poco más específico que eso. Conozco muchas idioteces. No importa, entiendo lo que quieres decir". Naruto se interrumpió en medio de la frase cuando el hombre en cuestión entró a la tienda.

Un simple propietario de una tienda De Dulces Donde viven las historias. Descúbrelo ahora