Episodio 0: La caída del puño de hierro

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El viento susurraba entre las hojas de los árboles mientras Sergio, Francisco y Rubén se adentraban en el oscuro bosque. La luna llena iluminaba débilmente el camino a medida que avanzaban con sigilo, sus pasos apenas audibles sobre la hojarasca. Los tres amigos habían entrenado durante años bajo la tutela del maestro Takeshi, y ahora estaban listos para su primera misión real como shinobis.

Sergio, el líder del grupo, ajustó su máscara de ninja y susurro:

Sergio: Es aquí, hemos encontrado al fin la base del clan del loto negro, no bajéis la guardia, no sabemos a que nos enfrentamos.


Francisco y Rubén asintieron, se colocaron a los lados de lo que parecía la entrada de la base mientras Sergio estaba encima de la puerta adherido a la pared usando Chakra.

Sergio: (Aquí y ahora es cuando acaba todo Hanzo Kuroi, has mantenido a los otros clanes bajo tu puño de hierro)

Rubén, el mas sigiloso del grupo, usando una serie de cables de acero y un kunai logra abrir la puerta de la base sin hacer el menor ruido.

Francisco, el mas veloz de los tres, se deslizo a gran velocidad al interior y se posiciono en uno de los lados de la entrada desde dentro.

Sergio: Iniciando operación "Caída del puño de hierro".

Narrador: Pero bueno, mejor si empezamos por el inicio, os contare la historia de como estos tres amigos comenzaron un camino lleno de piedras y aprendizaje.

Esta era la historia de un grupo de tres jovenes shinobis, los cuales tenían un brillo el los ojos llenos de ganas de mejorar día a día

Sergio, el mayor del grupo, era conocido por su habilidad con las técnicas ninja. Su cabello oscuro caía sobre sus hombros, y sus ojos rojos brillaban con misterio. Vestía un traje negro con llamas rojas junto a una capucha que le daba un aire misterioso. Había estudiado bajo la tutela del maestro Takeshi, un legendario maestro ninja que había entrenado a generaciones de shinobis.

 Había estudiado bajo la tutela del maestro Takeshi, un legendario maestro ninja que había entrenado a generaciones de shinobis

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Francisco, el más joven de los tres, destacaba por su velocidad y agilidad. Su cabello corto y sus ojos vivaces reflejaban su energía inagotable. Vestía un atuendo ligero y ágil que le permitía moverse con facilidad. Había crecido viendo a su hermano mayor entrenar como shinobi y estaba decidido a seguir sus pasos, tras varios años de hacer misiones junto a Sergio hicieron un pacto con Sake, volviéndose hermanos inseparables.

 Había crecido viendo a su hermano mayor entrenar como shinobi y estaba decidido a seguir sus pasos, tras varios años de hacer misiones junto a Sergio hicieron un pacto con Sake, volviéndose hermanos inseparables

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Rubén, el tercero en el grupo, era el más sigiloso y callado. Con cabello oscuro y ojos profundos, parecía desvanecerse en las sombras. Siempre estaba un paso por delante de los demás, lo que lo hacía invaluable en las misiones de infiltración. Había perfeccionado sus habilidades en el arte del sigilo desde una edad temprana.

Sergio afirma que fue capaz de robar las respuestas del examen de acceso mientras las escribía el maestro, sin que se diese cuenta

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Sergio afirma que fue capaz de robar las respuestas del examen de acceso mientras las escribía el maestro, sin que se diese cuenta.

Sergio miró a sus amigos con seriedad y dijo:

Sergio: Hoy es el día en que comenzamos nuestro entrenamiento como shinobis. El maestro Takeshi nos ha enseñado lo esencial, pero aún tenemos mucho que aprender. Juntos, forjaremos nuestro camino ninja.

Francisco asintió emocionado, y Rubén asomó una sonrisa imperceptible bajo su máscara ninja. Los tres amigos sabían que el camino que habían elegido no sería fácil, pero estaban dispuestos a enfrentar cualquier desafío que se interpusiera en su camino.


La senda del ninjaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora