Blue Lock: Tempest

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6 - Visita
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Capítulo 6 - Visita

Cuando finalmente terminó la celebración del gol del Equipo W y el VAR silbó para que los jugadores volvieran a sus posiciones y comenzaran el juego nuevamente, Naruto quedó estupefacto al darse cuenta de que al principio no podía levantarse. Una vez que pasó la adrenalina, fue como si el sistema operativo de su cuerpo se hubiera apagado. Se sentía más agotado que nunca y su tobillo lesionado también palpitaba de dolor.

Necesitó toda su fuerza de voluntad para obligarse a ponerse de pie, pero cuando finalmente se puso de pie, la voz de Ego se escuchó inesperadamente por los parlantes:

"Uzumaki Naruto, estás demasiado lesionado para seguir jugando. Te sugiero que te quedes fuera el resto del partido".

Sabiendo lo terco que era Naruto, tanto sus compañeros de equipo como Ego esperaban que él argumentara en contra de su decisión, pero el rubio en realidad obedeció.

"Eh, está bien."

Simplemente demostró lo agotado que estaba en realidad.

Unos momentos más tarde, dos hombres vestidos con el uniforme del personal de Blue Lock entraron al terreno de juego con una camilla y lo sacaron, llevándolo directamente a la enfermería para que le revisaran el tobillo derecho.

⁂

"¿Cómo está, doctor?" Preguntó Naruto cuando el médico regresó con la radiografía en la mano. Una lesión era lo último que quería en ese momento, mientras estaba en medio de la selección eliminatoria de Blue Lock.

"Nada grave, no te preocupes. Ni siquiera es un esguince; es sólo un hematoma. Ponte un poco de hielo y mantén el pie elevado por hoy. Evita torcerte el tobillo en los próximos dos días, y deberías estar tan bien como puedas". nuevo. Sería una buena idea usar estas muletas hasta que puedas caminar sin ningún dolor."

"Entiendo, gracias."

Levantándose de la cama de la enfermería, Naruto hizo una reverencia al médico y, después de coger sus muletas, se fue.

Una vez que estuvo fuera de la vista del médico, puso su peso sobre la pierna lesionada para comprobar el nivel de dolor. Hizo una pequeña mueca ante el sentimiento.

"Mierda."

No le dolía tanto como inmediatamente después de recibir la falta, pero no podía verse jugando ni siquiera a la mitad de su capacidad si tenía que correr y disparar mientras soportaba ese tipo de dolor. Tenía muchas esperanzas de recuperarse a tiempo para el próximo partido.

"Deberías escuchar al médico y evitar poner peso en ese pie", se escuchó una voz desde atrás, y Naruto se sorprendió cuando giró y vio quién era.

"¿Señor Busujima? ¿Cómo está aquí?"

"¿Qué puedo decir? Me encanta el fútbol. Saeko me dijo que quería verte-"

"¡Otousan!"

"-y esa era la excusa perfecta que necesitaba para visitar Blue Lock".

El humor jovial del hombre de mediana edad contrastaba bastante con la expresión avergonzada del rostro de su hija.

"Por cierto, ¡ese gol que acabas de marcar fue absolutamente fenomenal!" Dijo de repente el señor Busujima, lleno de emoción. "Me recuerda al gol de Roberto Carlos contra Francia a finales de los 90. ¡Gah! ¡No puedo esperar para mostrarles las imágenes a mis amigos!"

Si sus manos no estuvieran agarrando sus muletas, Naruto se habría frotado la nuca avergonzado al ver cómo un hombre de más del doble de su edad fanfarroneaba con él.