Dragons Scape. [Fooligetta]

Joyas. ⁰⁴

– Caminaba en bucle en frente del dragoncillo, analizando sus detalles y a sus llamativos ojos violeta, estos mismos seguían sus movimientos como si fuera un felino.

— So, qué vas hacer? No sabes nada de dragones — Dijo al de aletas de tiburón, mientras se deslizaba como una baba por alrededor del dragón.

— Pero puedo aprender — Se agachó a la altura de la criatura para acariciar su cabecita.

– El dragón estaba siendo muy pacífico y de hecho buscaba que Foolish le acariciara en manera de decir que le quería, porqué quizá la criatura tenía mamá, pero quien le ha cuidado desde embrión ha sido el tritón.

– El tritón procedió a cargarle en brazos examinando su escamosa piel morada con algunas manchas naranjas, lo cuál era extraño ya que de por sí los dragones podrían normalmente variar sus colores haciéndose uno solo.

— ¡Es macho! — Exclamó Slime al ver sus colores, suponiendo lo que creía.

– Leo solo lo miró de manera peligrosa, amenazando con diluirlo en las aguas calientes residuales si volvía a decir que era macho.

— Well, creo que este no es el caso — Rió y luego acarició a la de escamas, calmandola instantáneamente.

[...]

– Habían pasado semanas, casi un mes desde que Leo rompió el cascarón y su padre adoptivo se había prometido cuidarle y enseñarle todo lo que sabía, desde la punta del océano, hasta la tierra de los humanos.

– Leo es un dragón muy capaz, es hábil y buena luchando, algo de lo que el ojiverde estaba muy orgulloso. Justo ahora se encontraban sentados en una piedra de mar en la superficie del agua mientras que el mayor veía a lo lejos el mismo barco brillante del otro día, y se moría de ganas de robarse algunas joyas.

— Hey Leo, quieres unos rubíes y esmeraldas? — Preguntó juguetón con una sonrisa pícara mientras miraba a su "hija".

– Leo solo asintió, dejando ver su afilada sonrisa y su cola agitarse. Ambos se adentraron al mar mientras nadaban lo más rápido que podían para hacer una emboscada bien hecha.

– Por otro lado Vegetta leía libros en la parte de arriba del barco, sin prestar mucha atención a lo que sucedía en las tranquilas mareas en las que se encontraba.

Claro, hasta que sintió un peso extra subir a la barca.

– Asustado, bajo del pedestal y sacó su espada de diamante, probablemente sería algún pirata inútil con ganas de algunas joyas y realmente era el último de sus problemas, solo que no esperaba encontrarse a un dragoncillo colorido.

— Ay, Dioses, ¡Qué mono! Pensé que era un ladrón hahaha — Soltó su espada e intentó acercarse a Leo sin saber que sería derribado por una cola de tiburón.

— Woopsie doopsie — Habló con diversión, viendo lo fácil que era derribar a un humano.

Vamos, Foolish mide 3 metros.

– El ojivioleta no iba a darse por vencido, con rapidez se levantó pero fué fácil que dos manos gigantes lo apresaran sin tener ningún chance de escapar.

Estaba frito y ni siquiera había escrito su testamento.

— Tranquilo viejo, solo quiero unas joyas para mi hija — Hizó contacto visual, quedando embobado por los ojos amatista que tenía aquél rey.

— Claro pero no tenías que haber hecho escándalo niño — Se quedó un poco enfadado, aunque le llamó su atención al ver sus peculiares ojos y facciones físicas.

Era un Dios, definitivamente.

— Si me bajas, podrás llevarte unos rubíes y granates que tengo en el cobertizo — Sonaba convincente.

– El tritón bajó al humano para que cumpliera su palabra, realmente no tenía fé de que intentara matarlo o escaparse, el ojiverde era más rápido, además de proteger a su “hija”. Llegaron al cobertizo seguidos de Leo que solo podía quedarse tras Foolish mientras observaba a Vegetta, no le tenía mucho miedo, pero era mejor no arriesgarse, nunca se sabe que puede hacer un humano.

– Foolish se embobó al ver las joyas, agarrando una por una para ponerlas en su bolso a mano, mientras que Leo solamente se quedaba un poco atrás, quería estar alerta por cualquier cosa.

Solo que no vió venir que su padre fuera capturado por una red de cadenas de hierro.

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apoco si tilín

el amor es una magiaaaaa

El hierro en los seres mágicos/mitológicos (esto lo saqué de Maléfica) hace daño, no necesariamente grave pero si los debilita, por eso Foolish no puede hacer nada al estar encadenado.