capitulo 3

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Todo su interior tiritaba...aquella mujer. Lorraine Luzios, era digna de temer, a pesar de ella ser la princesa del imperio, eso no le evitaba tener miedo o al menos un poco de ansiedad.


Haber, repasémosla.

Físicamente era genuinamente agraciada: Un pelo morado oscuro que lentamente se degradaba, Ojos color chaorita brillante, labios naturalmente rojos y una sonrisa encantadora. Pero mas allá de su belleza, lo que la volvió tan reconocida fue su estatus y carácter: La hija mayor de cuatro hijos, heredera del titulo de Archiduquesa por parte de su padre, el cual era la mano derecha de la emperatriz. Su inteligencia es codiciada y envidiada por muchos y era inclusive mas temida que la princesa heredera de Xek. Tetra Dioramuhat; Una mujer digna de su titulo y sobrenombre: " La Dalia Arisca".

-Mi señora?- Pregunto Greta al notar la disociación de su superior.

-...- La mujer se estaba perdiendo en sus pensamientos, hasta que sintió como uno de sus mechones dorados eran ligeramente jalados.-Ah...! Greta... que paso?-

-Mi señora... Se siente bien? La archiduquesa la esta esperando.- En ese momento la chica de pelo rubio se levanto, arreglando sus faldas con prisa.

-Si, dile a Daphne que ya estoy lista.-

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Al llegar al jardin se encontraron con una presencia deseada. Lorraine.

-Archiduquesa Luzios, es un placer conocerla.- La joven de pelo color sol vio a la de cabellera nocturna.

-Ah, Princesa Delilah, Amanecer del gran imperio de Arbezela, es un completo honor estar en su presencia.- Le dijo, pero en ningún momento hizo alguna reverencia, ni siquiera se paro de su silla, solo bajo la cabeza en señal de respeto y le sonrió.

- Le dijo, pero en ningún momento hizo alguna reverencia, ni siquiera se paro de su silla, solo bajo la cabeza en señal de respeto y le sonrió

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-Puedo preguntarle el por que de la reunion, princesa?- Sus ojos morados no se despegaban de la pobre chica, quien batallaba por no tiritar.

-Se que suena quisquilloso de mi parte, sin embargo, le quería agradecer personalmente por el detalle tan bello, esas flores sin duda me alegraron el día. En especial en estos días- Corrió una silla y se sentó con delicadeza.

-Se podría saber que esta pasando recientemente en el palacio? Si desea contarme.- Dejo a un lado su libro, dedicando toda su atención en la princesa.

-Ya sabe... desde que termino la guerra contra las islas Orian todos en el palacio han estado corriendo por la llegada de mi padre, sin mencionar que mis deberes junto con los de mis hermanos han incrementado en gran medida, eso en lo personal no me estresa ni nada, pero casi ni he podido salir de mi oficina. Usted debe entenderlo.- Se notaba que usaba las palabras correctas, sin dar inicio de algún rumor o chisme.

-Ya veo... Sin embargo, esto es una fiesta de té, que le parece si dejamos todos los asuntos laborales de lado y tenemos una charla tranquila, después de todo nos lo merecemos. No cree?- 

-Me parece. Gracias señorita Luzios.-

-Dígame por mi nombre, después de todo, estamos en privado, además... usted y yo somos amigas ahora, verdad..?- pregunto con timidez, esa coraza ocultaba una soledad casi mortal... como a Delilah.

-Así es... Lorraine.- Por primera vez Delilah le sonrió, ya no había miedo, ni ansiedad o temor, solo tranquilidad.

-Sabes, este té es delicioso, pero, tengo uno exportado directamente de Marloe, es simplemente exquisito!  Debes probarlo Delilah.- La confianza había brotado.

-Me encantaría probarlo, por favor podrías traerlo en nuestra proxima reunion? Sabes... es lindo tener alguien con quien hablar, en especial con alguien tan magnifica como usted.-



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La mujer de pelo solar se recostó en su cama, exhausta por todo el día que tuvo y por el que vendría... se suponía que los hijos ilegítimos no tenían tantas responsabilidades como los herederos reales, pero gracias a que Ariana ahora se la pasaba con su sabueso y pensando en hombres para su "Joyero" Ahora todas sus responsabilidades caían en los hombros de su hermana mayor!

ahora se tumbo entre los edredones, ahogando su rostro en una almohada  y dándose media vuelta, sintiéndose cálida y reconfortante.

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-" Florecita...Dime me veo bonita?"-

-"Tan bonita mami, como me veo yo?"-

-"Perfecta."-

Sangre dorada [las joyas de la princesa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora