Feel

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Kim SeokJin tenía veintidós años, era un joven alegre, positivo y seguro. Siempre lograba todo lo que se proponía y sobre todo podía conquistar a todos con su hermoso rostro. Estaba de camino a su hacienda después de seis largos años, conducía  su jeep escuchando música de Coldplay y recordaba a su hermano menor de diecinueve, Taehyung. Lo había dejado siendo un puberto y un diablillo de lo peor, recordaba que solía corretear con sus primos, Jeon Jungkook y Jeon Taemin. Eran hijos de sus tíos, Jimin y el Señor Jeon como le conocían al esposo del joven Jimin. 

Jimin se había casado con Jeon Jungkook padre, este tenía veinticinco años y Jimin solo dieciséis. Pero conquistó al Señor Jeon como todos empezaron a llamarle ya que Jimin siempre le decía: "Señor Jeon esto, Señor Jeon lo otro". Así que todos le llamaban Señor Jeon quien ahora tenía cincuenta años de edad, tres hijos llenos de vida y dos sobrinos que cuidar. 

Sí definitivamente Jin amaba su familia, pero no podía negar que extrañaba  a sus padres, ellos habían sufrido un extraño accidente y luego su tío Jeon se había tenido que encargar de sus tierras y las de su familia, entonces nació la hermosa y bella hacienda Epifanía. Vio a lo lejos las puertas de su hacienda, seguro estarían resguardadas por algunos de los vaqueros que ya conocía y se sorprendió cuando vio a su amigo, Ken.

─ ¿Desea algo...? ¿Kim SeokJin?─ dijo este viéndolo con asombro. SeokJin bajó y le dio un abrazo fuerte a su amigo de la infancia.

─ Ken, eres tú. 

─ ¡Qué hermoso estás!─ Ambos sonrieron y Ken le ordenó a los vaqueros que abrieran el portón. Así que subió al Jeep con Jin y entraron a la hacienda que tanto extrañaba, donde Jin esperaba cumplir el sueño de él y sus padres, una hermosa familia llena de felicidad con la hacienda más próspera del condado. 

Kim NamJoon tenía veintiséis años y toda su vida había trabajado junto a su padre en una pequeña hacienda que criaba a los mejores caballos pura raza, pero cierto día los bandidos les atacaron y destruyeron todo. NamJoon hecho una furia había masacrado a los bandidos, cometiendo el error de hacerlo públicamente. A sus quince años fue llevado a un correccional de menores y a los diecinueve había salido, pero su fama le hizo ser rechazado por todas las haciendas, hasta que conoció a Jeon Jimin.

Era un hombre dulce y convenció a su Señor Jeon de darle trabajo, empezó solo cuidando de los caballos y luego se convirtió en entrenador, pues Jeon notó su talento. Su trabajo en la hacienda era envidiable e irremplazable. Ahora era uno de los hombres más deseados, pero había roto el corazón de muchas mujeres y donceles que buscaban conquistarlo. El dios de la destrucción destruía a cualquiera con quién se acostara y no le importaba una familia. 

─ ¡NamJoon!─ gritó Taehyung corriendo hacia él. Este sonrió y se sentó en la pila de heno que llevaba para los caballos, los dos chicos se acercaron a él.

─ ¿Qué andan el día de hoy?

─ Lo mismo de todos los días, los hermosos gemelos Jung. ─ dijo Jungkook mientras suspiraba como idiota. 

─ No hemos podido acercarnos desde la feria del maíz en el condado vecino, Hoseok se veía hermoso con esos jeans ajustados.

─ Nop, Jhope se veía bellísimo...

─ Son la misma puta imagen. Se parecen mucho a su difunto padre, Jung Hoseok. Era una belleza y demasiado sexy. Pero cometieron el error de robarles un beso justo cuando Min se acercaba, eso fue idiota.

─ Ni me lo digas. Min Yoongi no los deja un solo instante... La vez pasada tenía a Hoseok tan cerca y sé que él con ese cabello color miel y sus ojos hermosos me miraba con deseo, pero su padre me dio con la fusta y se lo llevó. 

Feel A Real LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora