capitulo unico

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Mi urgencia de ver a estos dos como padres de Naruto gano, aquí Kakashi no aparece sino hasta el final, pero básicamente el sentimiento esta presente la mayoría del tiempo.

Esto me lo dedico a mi, porque me hace feliz <3

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Obito cargaba a Naruto alegremente balanceándolo en su brazo derecho, el niño de apenas seis años reía como loco en sus brazos, agarrando fuertemente su suéter negro mientras que en su otra mano llevaba una capa naranja con dibujos de pollos y patitos de colores, aunque ahora hacía calor, el clima variaba y lo último que quería era que Naruto enfermara.

—Muy bien pollito, ¿qué quieres comprar primero el Pan o vamos al mercado por las frutas? — dejó de balancearlo para tomarlo con más seguridad

—¿No podemos solo comprar dulces? — su entonación enérgica le saco una pequeña risa

—Kakashi nos matará si no traemos las verduras esta vez, ¿Acaso quieres que nos vuelva a esconder el chocolate? — preguntó divertido viendo a Naruto arrugar las cejas recordando que bebieron té verde por dos semanas, la mueca de asco que hizo solo logró que sus mejillas esponjosas se inflaran y Obito se contuvo físicamente de apretarlas.

—Las verduras son importantes— fue el veredicto final de Naruto y Obito simplemente hizo caso tomando rumbo al mercado, sonriendo tontamente cada que veía a Naruto maravillado por cualquier tontería que promocionan los vendedores.

De repente Naruto se sacudió como el pequeño diablillo que era y Obito inmediatamente lo colocó en el suelo viéndolo correr hacia un puesto de máscaras.

—¡Obito-nii mira! — Naruto casi saltaba viendo las máscaras llamativas en el exhibidor —Mira esta se parece a un zorro ¡¿No es genial?!— La mirada maravillada que le lanzó hizo reír a Obito, Naruto extendió su mano tanto como pudo para tratar de tomarla, mientras que él ya estaba tanteando sus bolsillos en busca del dinero para pagarla sonriendo resignado a comprarla.

Su sonrisa se congeló en cuanto vio a un hombre mayor salir jalando a Naruto de su ropa enviándolo directamente al suelo con fuerza, Obito no espero a que terminara de caer antes de tomar al niño en brazos en un ágil movimiento, Naruto aún estaba aturdido por el movimiento, pero rápidamente se pegó a él, escondiendo su rostro en su pecho mientras temblaba ligeramente.

— ¿Qué demonios te pasa? — Obito pregunto al hombre, la ira casi palpable en su tono, burbujeando a fuego lento en su cuerpo.

— No quiero que ese maldito monstruo manche mi mercancía— Su tono ronco y retorcido, hablando con si sus palabras fueran algo obvio.

— De qué mierda hablas— la incredulidad y el asco se reflejaba en su voz.

— ¡JA! Por supuesto hablo de ese inmundo monstruo, deberían haberlo ejecutado hace años, el Hokage se ha vuelto suave, dejando suelta a esa cosa—

Obito cubrió a Naruto con su cuerpo sintiéndolo temblar más fuerte, el inicio de un sollozo ahogado en su ropa, ejecutado un silencioso jutsu silenciador sobre él, su pequeño no tenía por qué escuchar la mierda de esa rata sobredesarrollada.

— Escucha bien hijo de puta, ¿de qué maldito monstruo hablas? Maldita mierda, lo único que acabas de hacer es golpear a un niño, ¿acaso eres tan miserable que golpear niños es tu hobby?, ¿eso te hace sentir mejor maldita perra? — Obito le dirigió una mirada ardiente el hombre se estremeció y retrocedió asustado.

— Esa cosa no es un niño, es el maldito Kyubi ese asesino que destruyó la aldea y se llevó a mi hija, debería estar muerto como ella— la voz llena de odio de una mujer se hizo presente junto al hombre, su porte digno daba a entender su estatus, pero la mirada indigna en sus ojos la hacía perder cualquier pedazo de dignidad que pudiera tener, Obito casi vomita al verla e inmediatamente escondió a Naruto cubriéndolo con la capa naranja, para que ni uno solo de sus cabellos fuera tocado siquiera por el aura de esa mujer.

Buenas y malas personasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora