Tras un largo día en la ciudad de Megapolis finalmente el sol se retiraba dándole paso a la luna acompañada por sus fieles compañeras las estrellas.
La noche era un descanso para todos tras largos días de trabajo, un momento de calma...
Pero también podía volverse el momento perfecto para los amantes, para aquellos que amaban con locura y se deseaban el uno al otro.
Ese era el caso del ahora Héroe y protector de la ciudad; Monkie kid, quien se encontraba en el regazo de un demonio de cabello rojo y vivas como una llama besándose con este.
Ese demonio no era nadie más y nada menos que Red son demon bull, su autroploclamado enemigo, pero también era su novio cuando nadie les veía.
Durante el día abajo de la luz que proyectaba el sol ante la vista de todos eran rivales/amigos, pero durante la noche cuando no había nadie más, cuando estaban en la intimidad del departamento del sucesor del rey mono.
Era entonces cuando ambos se demostraban su amor el uno al otro, ya fuese abrazándose viendo una serie o película en el sofá, repatiendose caricias, dandose besos el uno al otro, o haciendo el amor como era este caso.
El pelicastaño se encontraba sentado en el regazo de su amantes con una pierna de cada lado, sujetándose al cuello de aquel demonio que se aferraba a sus caderas con posesividad mientras se besaban.
Su cabello usualmente amarrado por su pañuelo ahora se encontraba suelto y desordenado, únicamente estaba usando una camisa que le quedaba un tanto grande junto a un par de bóxers mientras daba pequeños saltos en el regazo del pelirrojo el cual, no llebava más que su ropa interior, en donde habia un vulto bastante grande el cual topaba con el trasero del joven heroe.
Finalmente se separaron en busca del aire que empezaba a faltar, causando jadeos por ambas partes.
Debido a la falta de aire mk había inclinado la cabeza hacia un lado por el leve mareo causado por la falta de oxígeno.
Lo cual fue aprovechado por el demonio de fuego quien sonrio al ver como parte de la camisa colgaba de los hombros de su amante dejandole libre acceso a su cuello y clavícula, a lo que se relamio los labios mientras veía aquella piel acanelada con leves y ya casi invisibles marcas de encuentros pasados.
A lo que no dudo en acercarse, comenzando a besar y lamer ocasionando pequeños gemidos, finalmente enterró sus dientes en aquella piel, mordiendo con cuidado de no apretar fuerte, pero si dejando una marca al retirarse.
Al sentir aquella primera mordida inevitablemente el más pequeño solto un leve quejido convinado con un gemido, y no fue la última mordida.
Pues el pelirrojo empezó a dejar mordidas y chupetes por todo su cuello y clavícula, dejándolas como marcas de propiedad, recibiendo como respuesta gemidos y aclamaciones.
Por que en el día el joven podía verse inocente, tierno y puro.
Pero solo su amado sabía que en la intimidad de la noche este se volvía bastante acalorado, lujurioso e incluso siendo un poco sadomasoquista.
Y es que aquel héroe en el día podía proteger la ciudad y sus habitantes, dominando las fuerzas del mal manteniendolas a raya, pero en la noche amaba que su novio le dominará y le tomara, ya fuese con delicadeza o rudeza eso era lo de menos.
Por lo que no fue de extrañar que al sentir aquella boca empezar a dejar marcas de propiedad en su cuerpo este empezara a soltar más gemidos y empezara a acalorarse al punto de no tolerar su ropa restante, empezando a removerse incomodo.
Esto fue captado por el demonio quien sonrio al ver aquello y se acerco a su oído susurrando.
- ¿Qué pasa lindo? ¿Sucede algo? -cuestiono mientras que bajaba una de sus manos hasta uno de los muslos de su pareja apretando causando otro gemido
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NOCHE ENTRE AMANTES
FanfictionOne-shot de estos dos en una noche con calentura nada más por que me dio la pinchi gana y mis ovarios dijeron hazlo wey