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Jungkook estaba esperando a Jimin dos bloques lejos de la casa de su madre. Esperaba que pudiera encontrar los papeles rápido. Jimin había entrado sigilosamente con la ayuda de la ama de llaves, a quien conocía desde pequeño. La única que quedaba de su niñez pues todas habían renunciado a causa de su madre.

—Bien, ya tengo los documentos oficiales—Miró hacia la habitación de su madre y se quedó pensando—¿Debería?

Miró su reloj de mano y soltó un suspiro nervioso, aún tenía tiempo. Así que decidió entrar y cerró la puerta rápidamente para comenzar a buscar con sigilo. Algo tenía que haber que pudiera ayudarlo durante el juicio. Estuvo buscando por cada rincón de aquel cuarto con cuidado de no dejar desacomodado, no pudo evitar tropezar haciendo que su cabeza chocará con en clóset. Sin levantarse logró visualizar una caja al final de este, así que decidió tomar la y abrirla para ver su contenido.

—Las medicinas de papá...—susurró para si mismo

Recordaba como su papá pasaba cada día en aquella cama esperando que las medicinas recetadas por el médico dieran efecto, su enfermedad era curable solo necesitaba ser constante con los medicamentos para curar rápidamente. Recordaba aquellas medicinas, dos pastillas por la mañana y un brebaje durante la tarde, al final del día una sola pastilla. Las enfermeras le habían enseñado a Jimin como dárselas por si se llegaba a necesitar. Pero su madre fue quien siempre se encargó de eso, nunca dejó que Jimin se involucrara. Dentro de esa misma caja había varios frascos vacíos con una etiqueta sin nombre, al menos no era visible. Tomó dos de aquellos y se les quedo viendo fijamente.

—Ella lo envenenó—dijo la ama de llaves—Se lo daba en vez de darle el brebaje, eso terminó matando a su padre—dijo y comenzó a sollozar—Lamento nunca habérselo dicho pero ella me amenazó, no sólo con despedirme también amenazó con terminar con mi familia—dijo y se arrodillo—L-lo lamento mucho señor Park

Jimin no supo que decir, sabía que su madre era cruel, pero no sabía que hasta que nivel. No dijo nada y solo la ayudó a levantarse.

—Haré lo posible para que mi madre no ponga ningún pie fuera de la cárcel, pero voy a necesitar su ayuda

—¿E-enserio cree poder contra ella?—dijo atemorizada

—Juro que haré lo posible, ahora tengo que irme pero tiene mi número, estaremos en contacto —dijo y guardó esos dos frascos en su bolsillo para luego salir de la mansión.

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Mientras tanto jungkook se encontraba en el auto en su sesión diaria de karaoke mientras esperaba que Jimin volviera de la mansión, pero el timbre de su teléfono le cortó la inspiración.

—¿Qué pasó Nam? Interrumpiste algo importante—dijo haciéndose el ofendido

—¿Llegaran pronto? ¿Sucedió algo?

—Agh, estamos bien, solo estoy esperando a Jimin porque tuvo que bajarse a hacer algo, pero pronto estaremos allá Romeo, no desesperes

—S-solo quería saber si estaban bien

—Aja, claro Kim—dijo con sarcasmo—Mejor dí que estas desesperado por tener a Jimin viviendo en tu casa, ya enserio Namjoon, ¿cuándo le dirás lo que sientes por él?

—¿Estas loco? No quisiera destrozar nuestra amistad, sería incómodo para él y no quiero que Youngsoo sufra si él se va

—Pero ustedes parecen ser bastante cercanos, yo creo que también le gustas

—Solo avisame cuando estén por llegar, ¿de acuerdo?

 Sweet as peach ʚ♡ɞDonde viven las historias. Descúbrelo ahora