~Mi Princesa~ |Fanfic RinxLen|

*1* ~Mi Princesa~

-¡Kya!- grite cuando Len soplo en mi cuello, realmente me asusté.

Len es mi mejor amigo, desde la infancia, también somos similares físicamente, aunque no es justo que él tenga el cabello mas largo que el mío y encima de todo esto lo ata en una coleta.

-Debiste ver tu cara Rin- dijo entre risas...¿que le parecía tan gracioso?

-¡No te rías! me lleve un buen susto- dije algo enojada, pero parece que Len se lo tomo enserio, lo note apenado.

-Um... Lo siento Rin...- dijo mientras dirigía su vista al suelo, este tipo de reacciones típicas en el me enternecían.

-Ya, esta bien Len, te perdono- dije divertida.

Len volvió su mirada a mi, siempre me gustaron sus profundos ojos azules, los cuales ahora habian recuperado algo... Serenidad ¿tal vez? No se lo tomaría tan enserio... ¿o si?

Luego de eso, el ambiente tomó un silencio incómodo, y mientras Len continuaba observandome, en algún momento fije mi vista en el suelo tratando de esconder mi repentino sonrojo, el cual no comprendía de donde salio ni tampoco esta situación.

-Rin...- dijo Len, rompiendo el silencio.

-¡Pequeña traidora, al fin te encontré!- grito furtivamente una voz que reconocí al instante, Gumi, mi mejor amiga pero a diferencia de Len, ella esta en primer año de preparatoria, y nosotros en segundo año.

-Eh... hola Gumi- dije con una sonrisa, pero mi sonrojo todavía se encontraba visible.

-Ooh, mira que hallarlos en tal situación...- dijo pícara, lo que me hizo reaccionar para mirar a Len, quien para mi sorpresa estaba sonrojado al igual que yo, o mas aún.

-Emm... Len ahora me tengo que ir, tengo clase de matemáticas- mentí, y antes de que Len llegara a articular palabra ya había escapado de allí.

Corrí lo mas rápido que pude pensando que Len me perseguiría, afortunadamente me di cuenta de que no era así y volví a caminar normalmente. Al parecer corrí tanto que llegue al patio trasero del colegio, y agotada me recoste utilizando como respaldo el tronco de un árbol, me quede dormida profundamente gracias a la suave brisa que recorría mi rostro.

Len Point Of View

Luego de que Rin se escabullera de esa manera tan obvia, (es que tenemos matemáticas juntos y además faltaban diez minutos para salir) el sonrojo se desvanecio y me reí un poco, media sonrisa se formo en mi rostro, así era Rin y no me quejaba, su personalidad alegre, su bella sonrisa, cautivan a todos a su alrededor, esa fue mi primera impresión cuando niños, la cual sigue en pie hasta el día de hoy.

A medida que el tiempo pasaba, conocia mas faces diferentes de ella, algunas divertidas, otras caprichosas o malcriadas, sus gestos y berrinches, y cada una de ellas me encantaban. Mis sentimientos fueron cambiando y se hicieron mas intensos, al punto de experimentar celos y fuertes palpitaciones cada vez que ella se acercaba demasiado. Ella es mi Princesa, mi primer amor.

-Len, Len- estaba tan absorto en mis pensamientos que no note que Gumi me estaba llamando hace ya un largo rato.

-¿Que co...- no pude terminar la frase cuando sentí una potente bofetada estampada contra mi cachete. ¿¡Que rayos!?

-Ups lo siento Len- dijo Gumi con un aire burlón, juntado sus dedos índices de forma inocente... inocente una mierda.

-¿Me dejas terminar la frase?-

-Claro- dijo con una sonrisa. Le tengo cariño pero a veces llega a ser estúpida.

-¡¿Que cojones quieres?!- dije con furia, fulminandola con la mirada.
Gumi noto el peligro acercarse (al parecer tan estúpida no era) y se puso en posición dispuesta a correr. Pero al instante lo pensé bien y puse mi pie rápidamente en el piso; efectivamente Gumi cayó de cara, (uuh hasta a mi me dolió) y se levanto con la nariz roja como bola de adorno en navidad.

-Cuanto lo siento Gumi- dije con el mismo tono inocente que ella utilizó minutos antes, acompañado de un gesto tierno de aegyo*.

De repente recorde que tenia que recoger mi mochila e irme a casa, y me fui a paso rápido dejando a Gumi sola, la venganza es tan placentera.

-¡Me las pagarás Len Kagamine!- oí gritar a Gumi con rabia, aunque le resté importancia.

Mientras caminaba por el pasillo hacia mi aula, observé por una de las ventanas a Rin quien estaba profundamente dormida, me acerqué sigilosamente y aparté un mechón rubio de su rostro, por Dios, es tan bella. Sin notarlo, me quede embobado mirándola, durante casi media hora.

De a poco abrio sus ojos y bostezo, formando una pequeña "o" con sus finos labios. Miro hacia todos lados hasta que noto mi presencia y se sorprendió mas de lo que hubiera imaginado.

-¡L-Le-Len! ¡¿que haces aquí?!-

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*Aegyo*: gestos tiernos o moes.

Hola! Pues esta es mi primera novela, espero que les guste y si les gusto por favor comenten y voten se los agradecería mucho :3