𝐒𝐞𝐫𝐞𝐧𝐝𝐢𝐩𝐢𝐭𝐲 (Fred Weasley)

【𝟐𝟕】

Alice:

Nos volteamos hacia la persona que gritó. Era Umbridge, con su característico vestido rosa, que se acercó a nosotros con una expresión de desaprobación.

— No puedo creer que actúen de manera tan desvergonzada —Dijo.— Sobre todo usted, señorita Lougthy, recuerde su posición.

Fred intervino con una sonrisa burlona.

— Profesora, ¿Acaso nunca tuvo pareja? Eso explicaría por qué es un poco amargada.

Umbridge se enfureció.

— Esto es inaceptable. No toleraré actitudes rebeldes e inapropiadas —Dijo mientras señalaba a ambos con su pluma.— 50 puntos menos para ravenclaw y gryffindor...

— ¡¿Qué?! —Exclamamos al unísono.—

— No he terminado. Además, están castigados —Añadió.— Fred, trabajarás en la cocina. Y tú, Lougthy, te veré en mi despacho antes de la cena.

Me sentí indignada, pero Fred estaba a punto de explotar. Lo detuve.

— De acuerdo, profesora, cumpliremos nuestros castigos.

Umbridge se marchó.

— ¿Por qué le diste la razón? —Preguntó Fred.— Es injusto lo que hace.

— Es mejor darle la razón —Le dije.— Así se siente poderosa.

Fred se sorprendió.

— Eres muy perspicaz.

Me abrazó y me dio un beso en la coronilla.

— ¿Para qué te citará en su oficina? —Preguntó.—

— No sé. A ti te tocó lo peor, trabajar en las cocinas.

— Ya estoy acostumbrado —Dijo Fred.— ¿Vamos a clase?

— Me encantaría, pero debo ir con los de primer año.

— Te acompaño. No me importa llegar tarde.

— Vamos —Dije sonriendo.—

[...]

Caminamos hasta llegar al salón de encantamientos, donde Mervyn nos esperaba. La clase de primer año aún no había terminado, así que debimos esperar frente al umbral.

Al acercarnos, Mervyn apartó su mirada de un libro antiguo y nos saludó con una inclinación de cabeza.

— Mervyn, disculpa la demora.

— No te preocupes, aún no ha terminado su clase —Respondió.—

Su mirada se posó en mí un momento, luego se centró en Fred, con expresión curiosa.

— Hola Fred, qué sorpresa que nos acompañes.

— Solo quería ayudar a mi novia —Dijo Fred, haciendo énfasis en la última palabra.— Espero que no te incomode.

— Para nada, con más ayuda mejor —Mervyn sonrió.—

Sentí que el ambiente estaba un poco incómodo. Decidí liderar la conversación.

— Ah, por cierto, Mervyn —Este me miró.— Gracias por el favor con la profesora Babbling, fue un lindo detalle.

— No es nada, todo sea por ayudar a mi compañera —Dijo Mervyn con gentileza.—

— ¿Favor? —Intervino Fred, intrigado.— ¿Qué tipo de favor?

— Mervyn le notificó a la profesora Babbling que llegaría tarde, por haber guiado a los de primer año.