Primera parte: La guerra.

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Despierto de golpe al escuchar las trompetas de los soldados que anuncian evacuación. Tenemos diez minutos para levantarnos, tomar nuestras cosas y salir al punto de reunión que nos indiquen, ya que llevo ocho meses haciendo esto, me resulta muy sencillo y me toma solo un minuto. Veo la consternación en los rostros de mis compañeros de refugio, tengo el impulso de ayudar a alguno de ellos, pero no lo hago ya que no los conozco. Yo he llegado ayer al medio día; el refugio en el que me encontraba había sido atacado y sólo cinco personas hemos sólido con vida así que nos asignaron un nuevo refugio a cada uno.

Una vez en el punto de reunión un soldado de cabello rubio y ojos grises nos dice que tendremos que separarnos en tres grupos ya que si nos atacan a todos es posible que el número de muertos sea mayor, pienso en por qué seguimos molestándonos en matarnos unos a otros por un pedazo de tierra, si bien el nivel del mar nos dejo sin tres cuartas partes de tierra; aun queda suficiente espacio para los humanos que aun vivimos, sin embargo el ejército de lo que en algún momento fue corea se ha empeñado en quitarnos lo poco que queda de lo que alguna vez fue América.

Recuerdo a mi abuela hablar de los bello que era el mundo cuando era joven hasta que una ola de desgracias azotaron al mundo; terremotos a escalas inimaginablemente posibles, maremotos, incendios, sequías y un sin fin de desastres que acabaron por hundir la mayoría de la superficie terrestre, y por dejar inhabitable otro tanto mas.

Lo cierto es que desde que yo nací solo he conocido de la existencia de tres países: Australia que parecía muy prospera ya que parecía que ningún desastre natural le había afectado. Por un tiempo fue el principal objetivo a conquistar de los coreanos, pero quedo sin rastro de vida y niveles exorbitantes de radiación debido a los ataques con bombas de pruebas que lanzaron para asustar a las personas que ahí vivían no resultaron bien.
Después esta Corea, aunque no siempre se llamo así ya que el país que originalmente llevaba ese nombre ha desparecido totalmente, al parecer los coreanos llegaron a un acuerdo con lo que queda de otros países para trasladar a la mayor cantidad posible de sus habitantes a cambio de protección, estos aceptaron ya que sabían que de no hacer igual terminarían siendo invadidos.
Y por ultimo esta Norte América que al igual que Corea se a unido con mas países; México y Canadá, aunque este último también ha ido desapareciendo poco a poco.

El soldado de poco a poco nos a dividido en tres grupos y nos pide que tomemos una mochila de provisiones, donde solo viene; una lampara, una manta, dos botellas de agua y una lata de valla a saber que cosa. Volvemos a formarnos en frente del soldado, pero esta vez esperados en tres grupos.
- Manténganse juntos y obedezcan las órdenes de su capitán al mando. Dice con una voz tan fuerte y firme como si hablara con soldados y no con refugiados. - Pelotón uno -Dice señalando el grupo a mi derecha,- ustedes van al mando del comandante Taylor. Un hombre de unos cuarenta años se pone enfrente del grupo que sin necesidad de muchas ordenes comienza a caminar con dirección al Sur.
- Pelotón dos - Dice el soldado señalando el grupo en el que me encuentro. -ustedes irán bajo el cargo del comandante Brian. Entonces lo veo, un chico de no más de veinticinco años, alto, con apariencia atlética de cabello castaño claro y unos ojos que al parecer aun no se deciden si ser cafés o verdes.
-¿tu?. Susurro. Por que se que lo conozco aunque no recuerdo bien de donde.

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⏰ Última actualización: Jun 19, 2015 ⏰

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