"Mi amor fue tan cruel como las ciudades en las que he vivido"
Después del rompímiento con este ser horrible decidí que lo mejor para mi era ir a terapia y en estos últimos meses me ha funcionado bastante bien, aprendí a soltar, aprendí a perdonarme a mi misma, a no juzgarme, y sobre todo a que todo pasa.
Estoy acostumbrada a que la gente hable de mi pero ya no tienen el poder de hacerme sentir mal.
Mis días eran cansados y aburridos, universidad pésima idea, era terrible en la escuela pero al menos siempre icónica.
Depressed but well dressed babe.
Le había pedido al universo un poquito de diversión sana y comprobé que manifestar es real.
—Yeri, es un gusto tenerte por la oficina, me encantaría decirte que son buenas noticias pero no, estás son tus notas.
Reprobaste varias materias, entiendo tu trabajo y eso pero también tienes que tener responsabilidad en tu escuela, por eso el consejo decidió darte una segunda oportunidad para hacer el examen y cómo queremos que realmente pases te asignamos un tutor.
—Oh, bueno, muchas gracias. Aprovecharé esta oportunidad.
No tenía más que decir después de la vergüenza pública jaja.
Fui por un Starbucks y empecé a checar la ficha que me habían enviado de la universidad, me dieron horarios y hasta abajo venía la ficha de presentación de mi tutor adjuntada con una foto tal cual CV.
Me quedé mirando la foto por un buen rato y seguía bajando para checar su información.
—Está Carita. -me sorprendí diciendo esto y me reí para dentro- sólo yeri mua piensa eso de su tutor.
Tiene pinta de que me va a asaltar en cualquier momento.
En su Currículum decía que no era mexicano, es español , que es de los más listos de la facultad y eso sólo quería decir una sola cosa : Vato mamon cotizado colonizador.
Algo que aún no había trabajado en terapia era a no juzgar a las personas antes de conocerlas.
En fin, mi primera tutoría era en la biblioteca y nadie me aviso que el era muy puntal, cuando yo llegue el ya estaba ahí.
Lo admito, el hombre es guapísimo.
Los tatuajes le quedan tan bien con esa piel blanca lechosa.
El cabello azabache es algo que jamás pasará de moda y por favor yo quedé ensimismada con aquellos ojos azules eléctricos que me miraban directo a los ojos.
Yo no iba en plan de ligue realmente iba a estudiar y hasta me puse mis lentes, me arrepentí porque eso no es el espíritu icónico de Yeri
—Controla tus hormonas vieja zorra. Me dije a mi misma.
—Hola, soy yeri. No sabía que te gustaba tomar así que te traje un agua.
¿Que mierda? ¿Enserio fue lo mejor que pudiste decir?
Oh no, va a pensar que estoy tonta no no no.
—Gracias, me gusta mucho el agua. —me dijo con un acento español tímido que quería seguir escuchando.
