Killian.
Desperté por el rugir de un motor cerca de mi sintiendo la mitad de mi cuerpo entumecido.
Me había quedado dormido en el asiento reclinado de mi auto, subí el asiento, sin salir y no reconocí el lugar en el que estaba.
Diablos, mi pobre carro huele a prostíbulo.
Ahora tendría que llevarlo a lavar para quitar el olor de licor y cigarrillos.
Dos golpes secos me sacaron de mis pensamientos, al girar mi rostro veo a Fernando recostado a la puerta, mientras le da dos golpes mas a al capo.
—Llegas a rayarlo y juro que te castro — digo, bajando la ventanilla, mientras me cubro los ojos cubriéndome del rayo de sol que entra por la ventanilla
—Hasta que despiertas, dormilón — dice con una sonrisa mirándome desde su puesto
—¿Qué quieres? —pregunto abriendo la puerta de mi auto y saliendo, mis piernas me lo agradecerían luego de estirarlas unos minutos
—En la noche iremos a casa de Cami, ¿vendrás con nosotros? —pregunta mirándome.
—¿Cami, la mejor amiga de Gina? — pregunté curioso.
—Si, esa misma, ¿irás con nosotros?.
—Bueno, no tengo más nada que hacer — dije mirando a mi alrededor, tratando de ubicarme en tiempo y espacio— Aunque pensándolo bien no creo que a Gina le guste verme en casa de su amiga, después de ignorarla por casi dos meses, por culpa de Em...
Y aquí vamos de nuevo.
Desde hace dos semanas, no he sabido nada de ella ni de los chicos, no tengo cabeza para hablar con ellos o verlos después de lo que sucedió, de seguro en cuanto vuelva a verlos Laila me pedirá que hable con ella y que la escuche antes de alejarme.
Pero no tengo nada que hablar con Emma, y agradecería al cielo no encontrarme con ella, no se como sería tenerla de frente, después de lo que sucedió.
—Gian, Sam y yo iremos a comprar algo para comer antes de ir a casa de Cami, si quieres vienes — dice Fer, mientras se aleja de mí montándose en su auto— yo no voy a comprar ni a llevar comida para nadie.
Termino de estirarme y me subo de nuevo al auto, enciendo el motor y salgo detrás de Fernando a la carretera.
En cuanto los chicos aparcaron en el paseo comercial, maldije mil veces interiormente, ya que a los imbéciles no se le había ocurrido un lugar mejor para ir a comer.
¿Con tantos lugares en Medellín, a ellos se les había ocurrido venir a este lugar?
—¿Que hacemos aquí? —pregunte en cuanto nos acercamos a un restaurante llamado "Carbón"
—Killian, me estás preocupando —respoonde Sam a un lado de mí mirándome serio— ¿Como no vas a saber lo que se hace en un restaurante?
—No seas imbécil — me quejó, mientras los demás ríen y caminan directo a las mesas.
Tomamos asiento en una mesa que se encontraba en el pasillo, daba vista completa al paseo comercial.
Al fondo pude ver aquel local que conocía tan bien.
"—Veo que alguien anda de muy buen Humor —comente riendo en cuanto abrió la puerta.
—Si, el día de hoy ha ido increíble —dijo ella con una sonrisa, al subirse.
—¿A ver cuéntame, que te tiene tan emocionada? — pregunte con curiosidad.
—Nina me ha dicho que me he desenvuelto muy bien este tiempo, y me ha propuesto agarrar las riendas del Spa —comento emocionada

ESTÁS LEYENDO
Love Yourself, Emma.
Teen Fiction@LoveYourself: Miles de cosas pueden sucedernos, pero lo importante es que acciones tomemos referente a ellas, para solucionarlas no basta solo con ignorar lo que sucede o encerrarnos en nuestra habitación y llorar desconsolados toda la noche -en oc...