Páramo.

Capítulo XIV

Capítulo XIV:

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PÁRAMO

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Feliz navidad, mi amor.

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(3) El odio sin retorno.

―Hola, Sasuke― Sakura lo saludo con timidez saliendo de su edificio, avanzo unos pasos en su dirección y clavo sus ojos verdes en él.

Sasuke estaba recostado en su coche, con un impecable pantalón de vestir color negro, la camisa azul marino desprendida al inicio que dejaba a la vista sus pectorales y la piel tan blanca que combinaba con la nieve que había empezado a caer esa noche, la ligera chaqueta oscura lo abrigaba. Sakura lo miro nerviosa y apretó el pequeño bolso color negro entre sus manos, llevaba ese delicado y corto vestido color plata y el blazer rojo del mismo largo manga larga por encima, las botas texanas color blancas acababan su atuendo. El Uchiha sonrió de lado abriéndole la puerta del copiloto.

―¿Te gusta como me veo?― Le preguntó coqueta cuando pasó por su lado y ese aroma a cerezas inundó todo el ambiente.

Sasuke clavo sus ojos negros en los labios rojos. Como amaba el color rojo, sobre todo cuando estaba en ella.

―Si― Asintió aproximándose a la chica y Sakura tembló al sentir su aliento en el cuello ―Te vas a ver mejor desnuda en mi cama después de la fiesta―

Ella sonrió nerviosa subiendo al coche y el pelinegro largo una carcajada burlona cerrándole la puerta, rodeo el coche y ambos se encaminaron a la fiesta de Navidad que se realizaba en el Colegio esa noche.

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Cuando Naruto la vio ingresar al salón de fiestas sintió como si el tiempo se detuviera, Sakura se veía preciosa con ese vestido, el cabello corto y laceo por sus hombros y las mejillas sonrojadas, el maquillaje resaltaba aún más sus ojos verdes. No fue hasta que Hinata tomo su mano entre la suya que se dio cuenta que llevaba más de diez minutos observando a su ex novia como un idiota.

―¿Estás bien?―

Naruto asintió observando los ojos color perla de su novia, apoyo una de sus manos en la delicada mejilla de la chica contrastando su piel tan blanca con la bronceada del Uzumaki y la acaricio despacito, ella cerro los ojos ante el mimo de su novio. Hinata era tan buena, tan transparente. Ella jamás lo engañaría o le mentiría porque Hinata realmente lo amaba, lastima que Naruto no lo hacia.

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―¿Qué carajos crees que haces? ―

El Hozuki dejó el vaso de lado y dejo de observar a la pelirrosa clavando sus ojos claros en Sasuke. Sonrió mostrando toda su dentadura y achinando sus ojos y guardo aquel frasquito de pastillas color naranja en el bolsillo de sus pantalones.

―Creí que esta noche podríamos divertirnos― Hablo lascivo y Sasuke bufo molesto acercándose más al albino.

―No quiero que te le acerques― Lo amenazó furioso y observó a la Haruno de reojo acercarse a ellos ―Lo que paso en la fiesta de fin de curso solo fue una vez― Suigetsu lo miro aburrido ―Sakura es mía, no la toques―

―Pues cuando me dejaste cogerla en tu casa no parecía muy tuya― Hablo con burla.

Sasuke lo miro furioso tomándolo del cuello de su camisa y llamando la atención  de varios de sus compañeros de clase en el salón de fiestas, Sakura se aproximó de prisa a ellos para evitar que expulsaron a su pareja del baile de Navidad y acabar pasando la noche buena en el coche del pelinegro bajo la nieve.