Un Perro Maravilloso (One Shot)

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Había una vez un pequeño pastor alemán, a pesar de ser muy pequeño, él era muy, muy grande, era el más grande y el más hermoso entre sus hermanos. Después de 3 meses el fue adoptado por una familia de 4 personas. Un padre, una madre, un hijo y una hija.

El padre era estricto pero amoroso. La madre lo consentía cada vez que podía. La hija no estaba a gusto al principio con la idea de tener una mascota, probablemente por su temor a los animales, y el hijo, aunque nervioso, fue abriendo su corazón al pequeño perro. Y de la misma forma, él le abrió su corazón a los 4.

Al inicio, los 4 pensaron en un nombre para el pequeño perro.

Pensaron, pensaron y pensaron, hasta que entonces, en la distancia, se pudo escuchar el sonido de un trueno.

El sonido asustó al pequeño perrito, pero con el sonido de aquel trueno vino un nombre.

Thor, el dios del trueno en la mitología nórdica, un nombre excelente, pensaron los 4.

Desde ese entonces, el pequeño perro empezó a ser llamado por aquel nombre, un nombre que aunque el perro no sabía de dónde provenía, sabía que era un nombre que le quedaba más que perfecto.

Tanto así que movió su cola de un lado a otro de la emoción.

Muchos años pasaron, el perro mordió zapatos, rompió muebles, ensució el suelo e incluso dejaba gotas de baba en el suelo, pero a pesar de que sus dueños lo regañaban, ellos nunca dejaron de quererlo, y él nunca dejó de quererlos a ellos.

Después de 5 años y de haber cambiado de apartamento, la familia introdujo a un nuevo miembro. Una perrita de 6 meses, su nombre era Fiona. En su primer día, los dos empezaron a jugar, pero en el proceso rompieron un cristal. A papá no le gustó mucho, pero aún así, él lo seguía amando, aunque parecía estar más molesto con Fiona que con Thor.

Los años pasaban, y aquellos dos niños que él había conocido habían crecido y crecido, justo como él. El niño ahora era un hombre, uno que empezaba a ir a la universidad, mientras que la niña empezaba a terminar la secundaria.

La vida fue buena, muy buena. Había risas, juegos y deliciosa comida. Juguetes, caricias, baños y muchas siestas en la cama de sus dueños, quienes le abrían los brazos cuando él saltaba en sus camas para dormir junto a ellos.

Sin embargo, un día, él ya no se sentía tan bien como antes.

Ya habían pasado 8 años desde que había conocido a aquella familia. El pequeño gran perro enfermó y sus dueños lo llevaron al veterinario. En el camino, el niño, que ahora era un hombre, acariciaba su cabeza mientras iban en el auto, una sensación que él siempre deseaba sentir.

Cuando lo llevaron, los veterinarios hicieron sus mejores esfuerzos para que se sanara, pero no pudieron hacer nada más que aliviar su dolor.

Antes de irse del reino de los humanos y mortales, Thor fue abrazado por sus dueños. Todos lloraban, deseando que él pudiera seguir con ellos, pero su hora había llegado. Pero él sabía algo, ellos lo amaban y él los amaba a ellos. Le dieron una buena vida y sabía que era el mejor perro de todos. Tuvo una gran vida, una vida que nunca pensó tener, pero una que atesoró para siempre, aunque lo que más le dolía era que no volvería a ver a sus dueños en un largo tiempo, no hasta que ellos tuvieran que irse del reino de los mortales. Pero él sabía que ese día llegaría y que todos volverían a estar juntos de nuevo, y que esto no era un adiós, sino un hasta luego.

Cuando se fue, sus dueños lloraron y lloraron y lloraron, pero saben que volverán a ver a aquel cachorro.

Y cuando escuchen un trueno, ellos recordarán que esos son los ladridos de aquel pequeño gran perro, y su nombre es Thor.

//Fin//

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Hola a todos, ha pasado un tiempo, y me disculpo por eso, quería hacer esta historia en honor a mi Perro Thor, un perro que fue parte de mi vida desde que tengo 11 años.

Lamentablemente el falleció hace un par de días, el 7 de Diciembre de 2023, y quería hacer esta historia para de alguna forma hacerle saber a todos lo genial que el era y lo mucho que lo amó.

El dolor de perder una mascota es una muy grande, eso lo se ahora. Este es un día que sabía que llegaría, pero nunca pensé que llegaría tan temprano.

Aquellos de ustedes que tienen mascotas de algún tipo, ya sea perros, gatos, conejos, etc. Aprovechen cada segundo que puedan con sus amigos peludos.

Ellos los aman tanto como ustedes los aman a ellos.

No estoy seguro si sea capaz de volver a escribir alguna otra historia por un tiempo, o si siquiera sea capaz de volver a escribir.

Pero solo se que mi perro fue el mejor que pude tener y que siempre lo amaré.

Te amó Thor, y siempre te amaré amigo.

Hasta luego a todos

Y hasta luego a mi querido Thor.

Te amó.

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