Salimos de los estudios Vance y cruzamos la calle para ir por una taza de café. Ninguno de los dijo nada hasta que nos sentamos y pedimos. Yo decidí pedir un cortado, pero Ross pidió uno entero.
Me di cuenta a los pocos segundos que los dos estabamos sentados mirandonos el uno al otro sin decir ni una palabra, hasta que el rompió el hielo.
-eres muy bonita- dijo, con una sonrisa de oreja a oreja-
Que?? Vamos despacio, me acaba de decir que soy bonita?? Okey cada vez mi dia tiene menos sentido.
-gracias-fue lo único que le pude responder-creo-añadí en voz baja.
Terminamos de tomar lo pedido, estaba muy sabroso y barato por cierto.
-que lástima- dijo - no quería que se termine tan rápido. Tengo una idea, quieres venir a ver mi penthouse?
-claro, quien no querría ver el pent house de Ross Lynch -me rei sarcasticamente y el lo hizo a continuación
Se pasó muy rapido el camino a su hogar, abrió la puerta y fue sorprendente lo hermoso que era, todo muy moderno.
Cuando me dijo que vaya a ver su habitacion lo primero que se me paso por la cabeza ya saben lo que fue, sexo.
Se pueden imaginar eso? Me encantaría hacerlo con él.
