"THE PARADISE" - VHOPE / KOOKMIN.

CAPITULO 1: EDÉN "PANDEMIA".

El mundo tal y como lo conocemos no era el mismo. Las cosas habían cambiado y mucho además. No solo porque la tecnología había avanzado, sino por ellos.

Todo empezó un día normal cuando de golpe todas las cadenas de televisiones y en todos los dispositivos como los móviles y los ordenadores apareció un comunicado junto con una voz femenina algo robótica pero que seguía teniendo un poco de ese toque humano que lo hacía más escalofriante.

El comunicado era extraño, nadie entendía que pasaba. La voz leía el texto que trataba de una especie de sitio llamado Edén, el cual prometía una vida. La gente estaba confusa y, durante una temporada, no se hablaba de otra cosa. Durante las comidas, durante las clases o durante los descansos del trabajo siempre había alguien hablando del comunicado. Algunos decían que era simple publicidad para algún tipo de cadena de pubs modernos, otros decían que solo era alguna broma que algún joven aspirante a influencer quiso hacer para darse a conocer, y otros empezaron solo a esperar, incluso a prepararse, para la hora en la que tuvieran que entrar a Edén.

Había pasado solo un mes cuando en todos los informativos apareció las noticias de los primeros muros que se estaban construyendo en todo el mundo. Esto solo hizo que la población se volviera más confusa, pero algo cambio de golpe. Los políticos empezaron a hablar de los muros como si de algo maravilloso de tratara, y en las noticias aparecía el nombre de "Edén" a cada rato.

Pronto, un gran muro fue construido a solo unos pocos kilómetros  de la pequeña ciudad en dónde HoSeok vivía. Él vio todo el proceso pero no le tomaba importancia. Solo eran muros, ¿quien iba a querer vivir encerrado en esos muros durante toda su vida? No había nada interesante allí dentro. Él era feliz con su móvil y poco más.

Una vez que los muros se terminaron de construir, un nuevo comunicado se anunció. Era el momento en que la gente podía entrar dentro de Edén. Te lo pintaban todo tan bien que incluso la madre de HoSeok le contó emocionada como iban a vivir ellos de bien allí dentro. Jhope no quería irse a vivir dentro de unos muros por el resto de su vida, a él le gustaba su pequeña casa donde él y su madre siempre habían vivido. Pero ella ya estaba preparando maletas, al igual que todo el mundo.

— Mamá. — Jhope se cruzó de brazos, apoyado en el marco de la puerta mientras veía a su madre doblar toda su ropa y guardarla en una maleta. — ¿Por qué quieres ir allí adentro? Son solo muros, no es nada interesante.

— Cariño, ahí adentro está el paraíso. Vamos a tener todo lo que siempre hemos soñado.

— Ese no es el paraíso, ¡son solo muros! Además, ¿cómo va entrar toda la población ahí? Es imposible, las casas van a terminar siendo enanas.

— La vecina del tercer piso me ha dicho que le han contado lo que hay dentro, ¡hay rascacielos con pisos de lujo!

— ¿Y te dan pisos de lujo así porque si?

— ¡Si!

— Mamá, ¿no te das cuenta que eso es un fraude?

Su madre paro de hacer las maleta y le miró algo enfadada. Ella tenía mucha ilusión por vivir en Edén y su hijo solo ponía peros.

— Nos vamos y punto. — termino la discusión su madre de manera inesperada.

Su madre tomo las maletas y obligó a HoSeok a qué cargará con unas cuantas cosas que llevarían a su nuevo hogar. Cerró la puerta de su pequeño departamento y bajaron por el antiguo ascensor transparente que aún tenía botones. HoSeok odiaba ese ascensor, estaban en el año dos mil cincuenta y cuatro y aún existían los ascensores con botones, pero los dueños de aquel edificio de departamentos no tenían dinero suficiente ni se lo querían gastar para poner un ascensor moderno con reconocimiento de voz, o al menos uno táctil. Salieron a la calle y se encontraron con gente yendo y viniendo con malestar en mano. Todos felices por ingresar a Edén.