Taxi

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Salir de casa sin el permiso de sus padres era algo nuevo para Choi Beomgyu, a pesar de ser un universitario mayor de diecinueve años aún le temía a sus padres. Con rapidez apagó su teléfono para después agarrar su mochila la cuál estaba llena de prendas.

Tenía pensado ir a la playa con sus amigos pero había un problema; no tenía el permiso de sus padres.

La adrenalina llenaba el interior de Beomgyu, era la primera vez que se escaparía de casa y los nervios se estaban apoderando de él.

Con cuidado bajó las escaleras de su casa, vió de reojo a la sala encontrándose con sus padres viendo la televisión. Hizo una mueca de nerviosismo y trató de bajar con cuidado, sería imposible salir de la casa sin ser visto pero intentó ser cuidadoso.

— Oh Beomgyu, ¿a dónde vas? — preguntó la señora Choi al ver a su hijo cerca de la puerta.

« Mierda »

Beomgyu vió hacia el techo para inventar algo creíble.

— Uhm yo...ehh, iré a casa de Yeonjun — soltó con nerviosismo.

La señora Choi frunció el seño al ver el nerviosismo de su hijo, lo conocía a la perfección para saber que su hijo tenía algo. Con lentitud se levantó del sofá para acercarse a Beomgyu quien tembló al ver la acción de su madre.

— ¿A qué? — preguntó con seriedad.

— ¡Haremos tarea mamá! — gritó ya fastidiado.

La señora Choi se echó para atrás al escuchar el tono de voz de su hijo, frunció el seño enojada y se cruzó de brazos con decepción. Negó con la cabeza antes de hablar.

— Te quedas — fue lo único que dijo.

Beomgyu abrió los ojos mas grande de lo normal al escuchar las palabras de su madre.

— Es tarea, si no voy no pondrán mi nombre en el trabajo y voy a reprobar, disculpa por contestar mal pero llego tarde y mis compañeros pueden avanzar — con rapidez se acercó a su mamá para agarrar su muñeca e intentar rogarle — por favor mami, tengo que ir — siguió con la voz más calmada.

La señora Choi asintió, entendía el comportamiento de Beomgyu, además no podía negarle el ir a hacer una tarea, su calificación era la que estaba en juego.

— Uhm está bien pero no tardes.

Beomgyu celebró en su interior al saber la respuesta de su madre, ahora solo tenía que ver que se inventaría para decir que no llegaría a casa.

Con rapidez salió de la casa, tenía una sonrisa mientras caminaba por la calle para alejarse lo suficiente por si su madre cambiaba de opinión.

Paró un taxi, suspiró aliviado al ver que este se detuvo, a pasos rápidos se acercó al taxi, abrió la puerta y se subió a este.

Sus ojos se iluminaron al ver al taxista, Dios el taxista era tan guapo, tenía los cabellos rubios, la mandíbula marcada, ojos grandes, labios carnosos y ahora ni hablar de su cuerpo, sus brazos estaban marcados y su pecho se veía grande. Beomgyu suspiró al escuchar al hombre hablar.

— ¿A dónde lo llevo joven?

Beomgyu salió de su burbuja al escuchar al hombre, movió la cabeza para recobrar la conciencia y sonrió.

Con timidez le dio la dirección al taxista, tenía que llagar rápido o sus amigos lo dejarían. El taxi comenzó a moverse con él adentro, suspiró aliviado al saber que ya estaba por llegar.

A pesar de esta más calmado aún tenía muchos nervios, nervios que Taehyun — el taxista — percibió.

— ¿Se encuentra bien? — preguntó Taehyun con intriga mientras veía a Beomgyu desde el espejo retrovisor.

One shots Taegyu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora