Don't look down.©

Capítulo 1: "Primer día"

Emily:

—Juro que si no te levantas ahora te derramare agua congelada encima. -dijo mi mejor amiga gritándome

—Me haces eso y juro que vas a terminar sin poder moverte Alise. Déjame dormir cinco minutos más-murmuré intentando mi tono amenazante

—Se que tienes fuerza porque boxeas-bufó en tono obvio reprimiendo una risa-pero no me importa una mierda porque no pienso llegar tarde a nuestro primer día de clases. -dijo poniéndose frente a mi y quitándome las sábanas

Aghh, parecíamos niñas pequeñas.

—Maldita sea madrugar, esta vida más cruel no puede ser-dije pasándome las manos por la cara dramáticamente desesperada y frustrada

—¿Por qué no te duchas y te vistes?, y bueno peinarte no tanto porque tienes cabello corto, pero arréglate y comienza de cero. Conoce gente, diviértete, es una escuela nueva no es como si estuviéramos en el planeta Marte o algo por el estilo. -dijo sentándose al lado mío brindándome una dulce sonrisa

Ella siempre había sabido sacarme ánimos. Fuera muy distinto si no viviera con ella. Vivo con mi mejor amiga porque mis padres murieron y como buena amiga me ofreció venir a vivir con ella para no dejarme en la calle. Tuve que dejarlo todo y venirme a un nuevo estado que apenas había visitado. Ella conoce la escuela, pero yo no y realmente no quiero ir, aparte de que desde hace tres semanas he tenido insomnio.

—Tu ganas, pero con la condición de que me ayudes a conseguir un gimnasio donde pueda practicar boxeo. -digo con fastidio notando como me sigue observando con ojos de cachorrito

—Trato hecho. -dice con una enorme sonrisa de forma victoriosa

Me levanto perezosamente y voy al baño. Me miro al espejo fijándome en que ya no me quedan rastros de heridas ni nada. Me miro los brazos y tengo uno que otro moretón pero nada grave. Yo presencié la muerte de mis padres. Fue hace tres semanas en un accidente automovilístico y ellos perdieron la vida, lamentablemente.

Siento mi alma vacíame. Siento que nunca les pude demostrar el cariño que se merecían y la culpa siempre la cargaré.

*Flashback*

—Ya te dije hija no vas a seguir cogiendo clases de boxeo. -dijo molesta mi madre

—Mamá ¿acaso no lo entiendes? el boxeo es parte de mi, gracias a eso he sabido defenderme. Es algo que ya acostumbro a hacer ¡Es mi pasatiempo favorito!-dije molesta

—¡Dije que no maldita sea ¿qué acaso no puedes ser una hija normal y no una hija que se comporta como un hombre?! -dijo gritando

—Papá di algo. -dije intentando que él me apollara

—Tu madre tiene la razón. -dice en tono obvio

—Son los peores padres, no es justo. Yo los apoyaría en cualquier cosa-estaba tremendamente alterada y mi corazón latía con fuerza

—Cállate -dice mi padre quitándole sus ojos de la carretera para mirarme mal, harto ya de la discusión

En un pequeño instante. Todo mi mundo dio vueltas. Todo se fue. Sintiendo como mi cabeza choca con algo fuertemente, siento como dábamos vueltas y se incrusta un palo en el pecho de mi madre. Mi padre no reaccionaba ya que botaba mucha sangre de su cabeza. Todo estaba pasando tan rápido.