Epílogo

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Momo se despertó respirando pesadamente en su habitación, miró a todos lados bastante confundida antes de poder calmarse en su cama, no era su habitación en la mansión ni en los dormitorios, era una habitación diferente, con paredes en rosa pastel que le gustaba cuando era niña, su cama era también bastante simple para lo que estaba acostumbrada y su armario era bastante diferente al igual que su escritorio que se había encogido y cómo no su librería personal que ahora era un mueble en la pared que tenía algunos libros.

Momo- dónde estoy? - se levantó y miró lo que usaba- eh? - una pijama amarilla con estampado de conejitos- ok? - salió de la habitación llegando a un pasillo dónde al mirar había otra puerta cerrada y al mirar al fondo otra habitación que intuía era de sus padres

- Momo? - se escuchó a su madre por lo cual la pelinegra avanzó hacia el otro lado del pasillo llegando a la sala que estaba de un lado y al otro estaba el comedor dividido con la cocina- me alegro verte despierta tan temprano- dijo con una sonrisa confundiendo más a la chica

Momo- mamá dónde estamos? - su madre le miró extrañada antes de apagar el fogón

- que dices cariño? Es nuestra casa... - su madre se acercó tocando su frente, asegurándose de que su hija no estuviera enferma

Momo- y que pasó con la mansión? - se le notaba bastante nerviosa

- mansión? - no terminó de entender los primeros minutos- oh la mansión que fue de los abuelos... - se calmó la mujer, su hija habían despertado muy rápido- recuerda que la vendieron luego del tema de las empresas y su unión con Midoriya-kun- su hija terminó confundida

Momo- eh?! - su madre soltó una risa por lo bajo

- mejor ve a sentarte, el desayuno casi esta listo- fue hacia la cocina en lo que su hija iba mecánicamente hacia la mesa- y no te olvides que quedaste con verte con Ochako en el parque - le recordó a su hija la cual se mostró emocionada

Momo- Ochako está bien?! - su madre le sonrió

- claro que si cariño, por qué no lo estaría? - contestó con gracia- a menos que hayan hecho algo en UA, o más íntimo... - miró a su hija la cual tardó unos segundos en darse cuenta a lo que se refería

Momo- mamá!! - su madre soltó una risa

- sólo bromeo contigo cariño- sirvió el desayuno al cual su hija miró muy detenidamente- adelante...

Momo- gracias por la comida... - no recordaba la última vez que probó la comida de su madre y la verdad sabía excelente

Tras eso se dio un rápido cambio de ropa, dándose cuenta que su armario tenía demasiado poco de aquellos vestidos que sus padres le compraban a montón, en realidad había muchas cosas que le eran bastante agradables y que seguramente usaría demasiado.

Salió del departamento en el cual aparentemente estaba viviendo con sus padres y bajó hacia la calle, se veía un buen vecindario y según mamá no muy lejos de la casa de Ochako, eso le pareció todavía más raro...

Miró por las calles caminando por las calles tratando de ubicarse y ubicar el parque dónde quedó con la castaña, habían muchos negocios y muchos héroes que pasaban por el lugar, trató de buscar algo más de información y se sorprendió mucho.

Momo- " Midoriya nuevamente en la ayuda" - una sola noticia del pecoso y no terminó de entenderla- que está pasando... - murmuró confundida

Siguió caminando por la ciudad hasta llegar al parque que tanto buscaba, entró sintiéndose un poco más calmada al ser algo tan tranquilo, no tenía ni idea de dónde podía estar Ochako y la verdad no quería hacerla esperar.

canto de la libertadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora