Cap. 1

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—Un día muy largo, ¿No, Han? — Negué con la cabeza.

—Bueno, ¡Arriba hombre! Hoy te toca entregar 100 cajas y apenas llevas 54. — Me dijo un poco frustrado, estaba claro que todos esos paquetes no llegarían hoy.

—Ash, ya voy. — Me apresuré a levantarme y alistar todas las malditas cajas en el camión oxidado que se encontraba a un lado nuestro.

Tenía mucho por hacer, comencé a las 5:09 a.m a entregar pedidos de la empresa "Higher twins", lugar encargado de utensilios del hogar. Mi mayor pregunta era, ¿Te cuesta tanto venir a buscar unas ollas? A veces no entiendo a las personas con dinero, pero aquí estaba trabajando en esta porquería, si quería ganarme la vida tenía que hacerlo, nada es gratis en este mundo y más si apenas tienes 20 años.

—Yeyo, ¿Y si nos perdemos? — Le dije a mi compañero, él era quien conducía el camión por más experiencia.

—Tranquilo, es una residencial de ricos, no nos dejaran entrar con esta ojalata, caminando nadie se pierde. — Habló seguro de sí mismo, pero yo aún tenía ese miedo.

—Bueno, ya, son 35 cajas, tú lleva la mitad. — Me bajé del camión y agregué en lo que cerraba la puerta inmensa. —Y no olvides apuntar a quien ya la entregaste.

Sabía cómo era Yeonjun, la persona más olvidadiza de este mundo, la única razón por la que no está despedido es por mí.

—Okey, ¡Vamos!

—Vamos.

Pasaron aproximadamente 14 minutos y seguía con 14 cajas, me había extraviado en todas esas casas y no lograba hallar la de la caja más grande. El peso me molestaba.

Decidí tocar la puerta de una casa muy linda, no había pedido algo pero todas sus ventanas estaban abiertas, raro en lugares así.

—¿Buenas? — Volví a tocar y nadie atendía. —Tenga linds tarde. — añadí rindiendome, en eso mi cuerpo se iluminó al ver a alguien justo en la entrada.

—¿Hola?

—Disculpa, ¿La casa 34?— Dije al observar a un chico alto, desgastado pero apuesto.

—A la izquierda, ¿Te ayudo?— Ofreció ayudarme, cosa que claramente acepté.

—Lamento haberte interrumpido.

—No estaba haciendo nada importante, tranquilo.

—Aún así veía la necesidad de disculparme, señor..— Corté la palabra, necesitaba leer el nombre del dueño, estaba escrito en la puerta. — Señor Lee.

—¿Tan mayor me veo para que me llames así?

—De hecho no, pero su letrero dice eso. — Acomodé unas cuantas cajas en su brazos y las demás las sostuve yo.

Caminamos un buen rato sin decir nada más, el hombre era un tanto atractivo, de igual forma alguien serio que pareciera que te mira el alma, su rostro decía en letras enormes "DECEPCIÓN" De todos modos opté por ignorar eso.

—Y, ¿Cómo te llamas tú? — Me preguntó cortando así el hielo.

—Me llamo Han Jisung de la empresa "Higher Twins". — Voltee a verlo en lo que hacía un cheque en cada casa que ys habíamos entregado.

—Uh, trabajo pesado para alguien pequeño. —

—Supongo, pero nada en esta vida es fácil, ¿No? — Noté como su rostro sonreía aunque tenía la cabeza baja.— ¿Usted donde trabaja si puedo saberlo? — Seguí caminando con ya 5 cajas pequeñas.

—Lee's auditory, es una empresa de la familia que se encarga de llevar a la cima a grandes escritores. —

—Suena interesante. —

—Pará nada. —

Me quedé callado, preguntar de más estaba mal y preferiría estar en buenos términos y evitar una incomodidad.

....

Al final logramos terminar, tenía que volver al pesado trabajo, eran las 6:47 p.m y ni siquiera había almorzado. Llamé a Yeyo para saber cómo iba y me alegro escuchar que hizo todo al pie de la letra.

—Bien, muchas gracias, Señor Lee. De verdad ocupaba su ayuda. — Con una reverencia agradecí cordialmente al chico.

—Puedes decirme Minho, y no hay de qué, disfruté tu compañía, Ji. — Las palabras de él me conmovieron y quise darle un abrazo aunque fuera irrespetuoso, de todas formas lo hice con mucha felicidad; él simplemente correspondió de la misma manera.

—¡Hasta luego, Min! —

—Adiós, Ji. —

...

—¿POR QUÉ SIEMPRE TIENES SUERTE, JISUNG? —

—DÉJAME, EH. —

—Amigo, ¿Quién en su vida se encuentra a alguien apuesto trabajando? — Íbamos caminando hacia el camión de vuelta, le había contado todo a Yeyo y él estaba exagerando las cosas, igual era algo divertido de él.

—Pues... — Fui interrumpido por un joven alto que chocó con Yeonjun. Era un guardia del turno noche, Soobin.

—Oh, lamento haberte lastimado, ¿Estás bien? — Me quedé callado observando la escena, el oficial le había preguntado con amabilidad a mi amigo y ví como sus ojos se iluminaban, ¿Ahora quien tenía suerte? No pude evitar reír bajo.

Cuando nos fuimos de ahí, Yeonjun estaba sonrojado y yo muerto de la risa, eso sería algo que jamás olvidaría, al igual que la hermosa sonrisa del Señor Lee.

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—Han Jisung... — Busqué por internet al chico que había ayudado hoy, me hizo sentir mucho mejor y necesitaba saber sobre él.

Fue una búsqueda de 20 minutos, no tardé de encontrar  su facebook, no subía mucho pero tenía fotos muy lindas de recuerdo con personas que parecían igual de felices que él, seguro era de familia alegrar a todos con solo existir, o tal vez yo estaba exagerando por tener un día malo como cualquier otro.

ENVIAR SOLICITUD DE AMISTAD.

ENVIAR.


Tenía que hacerlo, al igual que pedir su número, lamentablemente no lo hice por si eso afectaba su trabajo, habían muchas empresas delicadas que eran así y prefiero evitarme algún tipo de inconveniente. Me fui a dormir luego de eso, o bueno, intentar, no paraba de pensar en su voz...

"La risa es el sol que ahuyenta el invierno del rostro humano."

— Víctor Hugo.

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⏰ Última actualización: Jan 02, 2024 ⏰

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