Eternamente Tuyo

14.

Capítulo 14: Travesuras

"Otra vez, ¿en serio?" Gimo internamente cuando una mujer se paró frente a mí sonrojándose. "¡¡Tengo tetas !!" Le grito y le sonrío. "N-yo no los noté". "Son más grandes que los tuyos". Esta conversación me pareció tremendamente familiar, sólo que esta vez tenía una encantadora compañía de hombres enojados a mi alrededor. Déjame explicarte, después de que Kas se despertó, decidimos que yo era MÁS que capaz de visitar las aldeas por mi cuenta. Pude protegerme usando el arco y la flecha y no solo eso, si realmente estaba en peligro, podía usar el poder de Kas. Tenía mi propio entrenamiento de defensa personal y, junto con su fuerza, podía vencer a cualquiera.

Miré a mi alrededor a los machos deslumbrantes y susurraron entre ellos. Suspiré y decidí irme, si me quedo más tiempo puedo ser destrozado por un tigre. Ya obtuve lo que vine a buscar y no necesitaba regresar hasta que saliera de la cueva. Me alejé de la mujer sonrojada y comencé a alejarme. Sin embargo, cuando comencé, me tiraron del brazo y miré para verla pegada a mí. "Al menos quédate aquí un poco más", suplicó, pero lo ignoré. No tenía ganas de morir hoy porque una mujer decidió que me amaba. Saqué mi brazo de su alcance y puse mis manos sobre sus hombros. "Mira a tu derecha", dije suavemente y ella miró a su derecha. Vio a los hombres que continuamente me miraban con furia, incluso cuando ella los notaba. "Están tratando de imponer algún tipo de dominio sobre mí a pesar de que soy mujer. Me ven como una amenaza para tu amor", empiezo, haciendo que ella me mire. "No estoy interesado en ti y no quiero morir a manos de los hombres bestia de esta aldea", le digo y ella se toma un momento para procesarlo. "O-está bien. No te perseguiré", promete y la suelto. Tengo la ligera sospecha de que ella no cumplirá su promesa.

"Te veré en otro momento... er-" "Soy Sophia", dice con una sonrisa. "Te veré en otro momento, Sophia", le digo y le digo adiós con la mano. Ella le devolvió el saludo y saltó hacia las casas del pueblo. Salí rápidamente de la aldea y tan pronto como salí de las líneas territoriales, vi dos tigres gruñéndome desde dentro. Otros dos hombres se acercaron detrás de ellos, mirándome con dagas. "No necesitamos una hembra aquí que simplemente vaya a robar las hembras que ya tenemos", declara y pongo los ojos en blanco. "Ya le dije que no me interesa", respondo y empiezo a alejarme de nuevo. "¡¡Si te veo aquí otra vez mujer, no dudaré en lastimarte!!" Sus gritos cayeron en oídos sordos cuando lo apagué de espaldas a él. Quiero decir, si realmente la quisiera, entonces la habría tomado, simple.

A veces es agotador ser un bisexual seguro de sí mismo.

Caminé y caminé en silencio, perdiéndome en mis propios pensamientos. Debo admitir que las mujeres en este universo son hermosas y los hombres también son bastante bonitos. Este universo se basa en el reino animal, por lo que la apariencia es importante, al menos para los machos. Las mujeres eligen a los hombres basándose en su apariencia y fuerza, eso es todo. Por supuesto, las mujeres con personalidades feas no me parecen precisamente las más bonitas. Tuve la suerte de encontrarme sólo con mujeres amigables y sin prejuicios. Penélope me contaba historias de mujeres que se cortaban el pelo porque a otras mujeres el pelo más largo les parecía "feo". Esa es también la razón por la que mantuvo el cabello corto. Amy siempre tuvo el pelo corto, pero nunca escuché historias de ella sobre haber sido ridiculizada. Quiero decir, básicamente la usaron como niñera gratuita, así que les debió gustar de alguna manera.

Si me preguntas mi preferencia por el cabello en las mujeres, diría corto, pero ese es solo mi gusto. Las mujeres de pelo largo también me parecen preciosas.

Antes de darme cuenta, sentí algo resbaladizo envolver mi cuerpo. Una vez que salí de mis pensamientos, miré hacia abajo y vi una cola negra y escamosa con rayas blancas envueltas a mi alrededor. Miré hacia los árboles y vi a Kas sonriéndome. "Tardaste mucho y me preocupé", dijo, deslizándose por el árbol. Me soltó y se deslizó hacia mí, dándome un beso rápido. "¿Un hombre bestia tigre te robó el corazón o algo así?" Él pregunta y pongo los ojos en blanco. "Estaban más concentrados en mirarme que en tratar de ser mi hombre", murmuro, sin esperar que él me escuche.