LA NOVIA DE BANGTAN

Maldita suerte

Melania y Mario

– Vale,todo listo – dijo soltando el teléfono con el que llevaba horas

– ¿Has hablado con todo el mundo?

– Sí,las SS están enteradas,he tenido que tirar de mis hilos,por suerte conozco a unas cuantas bastante interesadas y la noticia correrá como la pólvora entre ellas,también he llamado a los noticieros,la prensa rosa, paparazzis y todo tipo de prensa amarilla,además de arruinarle la vida me voy a llevar un buen dinero,van a pagarnos bien por esta información,mañana a primera hora todo Korea sabrá quien es T/N T/A

– Puedes quedarte mi parte – Mario miró a Melania con desdén

– ¿Qué quieres decir? Es una buena cantidad,van a pagarnos bien por esta información

– Mi interés no es monetario,ya te lo dije – respondió encendiendo un cigarro y dándole una calada – Quiero que sufra,quitarle las ganas de vivir,quiero robarle lo que más anhela,dejarla vacía,hundida,quiero robarle su felicidad,igual que ella me arrebato la mía – Melania no pudo evitar sonreír ante las palabras de Mario

– ¿Realmente la odias?¿O es el amor no correspondido lo que mueve tu odio? – los ojos de Mario se volvieron oscuros cuando escucho la palabra amor saliendo de sus labios¿Como iba a quererla? Si T/N lo había rechazado para estar con ellos,había jugado con su orgullo y lo dejó para irse detrás de esos malditos chinos como una perra olvidando todo lo que ellos habian vivido,esos tiempo felices en los que solo eran ellos dos contra el mundo,aquellos dias en los que fue la única vez en su vida que habia encontrado realmente la felicidad a su lado,no,aquello no era amor,aunque la extrañase,aunque hubiera dado cualquier cosa para volver a su lado,aunque echara de menos esos días de risas y cariño,aunque aún recordase el olor de su cabello en las mañanas al despertar y como le gustaba el café,definitivamente no era amor

– La odio,realmente lo hago,no hay ni una pizca de compasión en mí para con ella,aquello que sentí alguna vez, dejó de existir hace mucho,en mi corazón no hay espacio para el amor,solo quiero vengarme – respondió arrebatándole la última calada al cigarro antes de lanzarlo por la ventana,Melania se sorprendió al verlo volar hacia la calle

– Aquí no puedes hacer eso,te multarán si te ven

Realmente Mario empezaba a estar harto de aquella situación,quería acabar con todo de una vez y volver a España,la presencia de Melania estaba empezando a resultarle insulsa y exasperante,realmente no queria nada de esa mujer,al menos nada romántico,solo le habia seguido el juego por sus intereses en común,ya que no conocia a nadie en Seul que pudiera haberle echado un cable y Melania habia llegado como caida del cielo para terminar de darle forma a su plan,realmente era estupida esa Melania,unas migajas de cariño y hacia todo el trabajo sucio,con esos aires de grandeza insultantes y esa prepotencia barata que provocaba risa,nada que ver con T/N,ella siempre lo ponía de buen humor,estaba realmente harto de aquella maldita mujer

– Haré lo que me dé la puta gana Melania,deja de meterte donde no te llaman y haz tu trabajo

– ¿Disculpa? – Melania sonaba bastante ofendida – ¿Mi trabajo? No he echo otra cosa desde que estamos aquí,en cambio a ti no te he visto mover un dedo,te recuerdo que esto estamos metidos los dos – esputo amenazante – Pero soy yo la que está moviendo lo hilos,la que hace las llamadas,la que habla con todo el mundo,¿¡Que cojones estas haciendo tu!?,solo sabes estar ahí sentado,fumando y bebiendo sin control y llorar a escondidas ¡Por la estúpida de T/N! – Mario abrió mucho los ojos por la sorpresa y Melania empezó a reírse en tono de burla – ¿¡Qué!?,¿Crees que no lo sabía? Jajajjaja,maldito imbécil,¿Piensas que no te oigo llorar desde mi cuarto en las noches borracho como una cuba anhelando los brazos de tu amada T/N?,estúpido – Mario al oír como se burlaba de él entro en cólera y salto sobre ella como un animal salvaje, atrapándola por el cuello y empujandola contra la pared haciendo que el cuerpo de Melania rebotase contra ésta,los ojos de Mario rezumaban en cólera,le agarro los brazos por encima de la cabeza para que no pueda zafarse de su agarre