Capítulo 3

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A pesar de que hace unas horas habían querido matarlos y tirar sus cuerpos en una fosa común, ahora estaban sentados y compartiendo mesa con su anterior asesino.

Wasuke estaba sentado en la cabeza, de su lado izquierdo estaban Sukuna, Megumi y Hayato; del derecho estaban Gojo, Yuuji, Suguru y en el otro extremo, frente a Wasuke, estaba Choso.

El intento de homicidio había pasado a segundo plano cuando la comida llegó, Suguru perdono a esos que quisieron matarlos al probar el primer bocado. Gojo ya lo había hecho ni bien vio a Yuuji, así que la cena se estaba llevando dentro de todo normal.

—¿Le puedo hacer una pregunta, Wasuke-san? —Pide Satoru. El anciano asiente dándole paso.—, Antes me acuso de robar la tienda de Yuuji, pero no entendí. ¿A qué se refiere?

Y no era mentira, Gojo no recordaba nada después de beber y comer carne con Suguru la noche anterior, luego de eso se despertó en el arenero del parque infantil. Así que no entendía la acusacion en su contra.

—¿No le dijiste, Geto-san? —Yuuji mira al azabache quien se palmea la frente.

—No creí que no recordará. —Ciertamente ahora que Suguru se ponía a pensar Gojo estaba actuando muy normal pese a que se había confesado a Yuuji.

—¿De que hablan? —Insiste.

—Muchacho, no me quiero ni imaginar las cantidades de alcohol que ingeriste. —Wasuke sonríe con gracia. Divertido le da una palmada en el hombro.—, Pero eso me dice que debes beber bien, toma un poco de sake conmigo la próxima.

—No debe beber demaciado, Wasuke-san. —Regaña Megumi.

—Abuelo. —Se mete también Yuuji.

—Oh vamos.

—Yuuji. —Gojo vuelve a la conversación inicial.—, ¿Que sucedió?

El peli-rosa se sonroja levemente, de todos los involucrados justamente le pedía explicaciones a él, quien ahora sentía vergüenza de recordar sus propias palabras, con desespero busca ayuda en Geto, quien tose llamando la atención de su amigo.

—Em, Satoru, verás... Cuando el sake te cegó, tú corriste hasta la panadería y golpeaste la cortina de chapa, la policía llegó por la alarma de seguridad y terminamos en la jefatura.

Gojo procesaba lentamente toda esa nueva información y como si de una especie de códigos se tratase, el rompecabezas en su memoria empezaba a unirse y mostrarle las imágenes de esa bochornosa noche.

—Yuuji y Sukuna llegaron y bueno, esto, dijiste cosas... —Geto no quería mencionar la declaración de amor, menos frente a toda la familia de Yuuji.

—... ¿Q-Que dije? —Pregunta con miedo, hasta ahora la película en su cabeza no tenía sonido.

—No creo que sea buena idea decirlo aquí. —Aclara.

El tema iba a quedarse ahí, pero Wasuke siendo el anciano entrometido que era se giro a ver a su otro nieto quien luego de un gran suspiro, dice:

—En resumen; dijo que estaba enamorado del pan de leche de la tienda y de Yuuji.

La cara de Gojo estalla de rojo al mismo tiempo que un ronquido nasal sale del intento de aguantar la risa por parte de Megumi.

—¡Sukuna! —Yuuji también estaba sonrojado, él tampoco quería recordar nada.

—¡Oh! ¿Así que te gusta mi nieto? —Wasuke pregunta descaradamente, mirando a Satoru.—, ¡Eso me agrada! ¡El me gusta, Yuuji! Es gracioso.

—¡Abuelo, no ayudas!

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⏰ Última actualización: Dec 21, 2023 ⏰

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A prueba de todo || GOYUU || JUJUTSU KAISEN AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora