Jake odia que Ni-ki fume. Desde que son pareja el menor siempre escucha lo mismo "apaga eso" "no fumes aqui dentro" "¿por qué no lo dejas?" "deberias dejarlo, por tu bien, amor", y lo que más molesta al mayor es que sus palabras le entran por un oído y le salen por el otro.
Estaban todos reunidos en la sala, y no era sorpresa para los demás miembros que jake y ni-ki eran pareja. Un día el más mayor del grupo (heeseung) les pillo casi teniendo sexo, la pareja le pidió al último mencionado que porfavor guardará silencio, pero eventualmente se acabaron enterando como era de esperar.
– Amor, ¿vienes a la cama? – ni-ki reconoció perfectamente la voz de su novio, y le asintió, levantándose y uniéndose a el para llegar a su cuarto compartido, los chicos vieron como se iban alejando.
Más tarde en el cuarto, jake estaba recostado en la cama, pensando en cuando había sido la última vez que el menor le complacio, no sabe si el es consciente o lo hace sin querer, pero incluso cuando le hace peticiones o es obvio con que esta necesitado sexualmente ni-ki parece simplemente o no importarle, o decirle que no tiene ganas... Y el respeta eso, no le malentiendan, no va a obligarle a nada que no quiera; al fin y al cabo es lo que más ama y nunca le haría daño, pero en algún punto simplemente se canso, y justamente mientras el se come la cabeza pensando en que sucede para que el menor simplemente no pareciera tener ningún interés sexual, ahí estaba el haciendo lo que su novio odiaba; fumar en la ventana.
Jake le observaba recostado de lado, tras la oscuridad y poca cralidad de la noche que la ventana abierta dejaba entrar. Todo de ni-ki era perfecto, tenía un cuerpo varonil, una voz gruesa y perfecta que tanto volvia loco al mayor, este se mordió el labio mientras recorria la espalda del menor con esa camiseta negra ajustada, un poco arrugada, y esos shorts grises que dejaban ver de sus rodillas abajo, y cuando por fin se atrevió a hablar:
– Ni-ki... – salió en voz baja, casi como un susurro seguido de un suspiro. – ¿mhm? – respondio. – ¿por qué no dejas de fumar y vienes aquí? conmigo. – el menor suspiro, se giro con el cigarro todavía en mano y se dejo escuchar. – ¿pararas con eso? no lo dejaré, y no tengo sueño todavía.
El mayor se moria de vergüenza, y su cara estaba roja, el menor no podía apreciarle en la oscuridad, y dudaba mucho que siquiera pudiera darlo por hecho.
– Pero no tenemos porque dormir, tú... simplemente ya no me tocas, ya no siento que tengas algún tipo de interés en mí sexualmente. – tenía lágrimas en los ojos, la voz se le iba casi quebrando, y aunque no quisiera mostrarlo ni-ki se dio cuenta, y la cara de este era un cuadro.
Incluso si no era su intención, hace un momento fue desconsiderado con la persona que se supone que ama y para colmo, esta llorando porque el a estado poniendo "excusas" para no tocarle, y cuando por fin se abre con el parece querer esconderlo, casi como si sintiera que le esta molestando, y el no quiere eso, quiere que su pareja confie en el, que se sienta amado, y satisfecho.
Ni-ki apago el cigarro en un cenicero cerca de su cama, suspirando se acosto de lado, mirando hacia jake, y atrajo a este desde su cintura un poco más cerca de él, escucho ahora mejor los claros sollozos que el mayor trato tanto de esconder para nada, y ahora el menor se encontraba intentando deshacer el nudo de malentendidos que el formo.
– No fue mí intención que te sintieras así, que pensarás que no estoy interesado en tí. Tú eres perfecto, eres lo que amo, cariño, cada parte de tu cuerpo es arte para mí. – mientras que se disculpaba, las manos del menor iban bajando lentamente por el cuerpo de su amado como si estuviera dando delicadas pinceladas. – eres como un lienzo en blanco que pienso pintar cada vez que tú desees. – jake inmediatamente supo a lo que se refería, y se preguntaba porqué hace 3 meses cuando empezo a suceder esto; no se le había ocurrido decírselo a ni-ki.
El mayor aparto con cuidado la mano de ni-ki de su estómago y le hizo pasar de estar de lado, a estar boca arriba, para así dirigirse a su cara y besar su boca, olía a tabaco, fue lo primero que penso. Eso por alguna razón le excito más, pensar en lo sexy que se veía su novio fumando (pero también en lo mal que le hacía), el beso se hizo más intenso, hasta que jake decidió parar, y fue bajando por el abdomen bien formado de su novio el cual puso una mano sobre su cabeza, alentandole a bajar más hasta llegar a su pene, que aún estaba cubierto por sus pantalones.
Restrego su rostro por completo en la parte de baja del menor, mientras escuchaba sus gemidos, que salían con una voz tan gruesa, la misma voz que le volvía loco y le animaba a seguir dándole (y dándose) placer.
Paso más o menos 1 o 2 minutos restregandose, hasta que sintió que liquido pre seminal estaba manchando los pantalones grises, y fue cuando se dio cuenta de que su novio no traía boxers. Bajo sus pantalones, y sin esperar a nada metió la boca en la punta, y fue bajando, sintiendo y lamiendo las venas del pene, hasta tenerlo entero dentro de la boca.
– Joder, no pares, muévete. – otra vez esa increíble voz a la que no podía no hacer caso.
se movio, rápido, lento, subía y bajaba por toda la longitud.
– Sigue, amor, porfavor. –
– Eres tan bueno, sabes como me gusta. –
– Muévete, eso cariño, y no pares. –
– Pequeña perra, estas hambrienta eh. –
Extrañaba tanto esas palabras, y sentía que se correría ahora mismo, pero quería venirse a la misma vez, asi que re-lentizo las subidas y bajas con su mano por su miembro, y cuando escucho un susurro "me voy a venir, abre la boca" cerro sus ojos, saco su lengua, y aumento el movimiento de su mano, hasta que tiras de semen salieron disparadas a su cara, y otras de el quedaron en las sábanas.
Sus respiraciones se sentian agitadas, y jake optó por coger unos pañuelos cerca de su mesa, pero cuando ni-ki vio las intenciones del menor, le paro con su mano.
– Espera... ¿puedo sacarte una foto? Solo para mí. – ya lo habian hecho más veces, no le resultaba un problema, pero está vez sintio timidez en la voz de su novio, lo que le hizo sonreír levemente, y asentir.
Así, jake se sintio satisfecho, y escuchado.