A la Deriva en un Juego de Simulación de Citas de Fantasía

Capítulo 9

“¡Lo logramos Ashur! Finalmente encontramos las escaleras al cuarto piso… Sin embargo, hay un presentimiento realmente malo que nos hizo retroceder…” Claudia habló con orgullo mientras le daba una palmadita en la cabeza como recompensa.

Hmm… sí… lo sospechaba. "Es un Guardián de Piso, algo que no es un monstruo normal, pero tampoco un Jefe por derecho propio, aunque generalmente es un subordinado directo del jefe mismo, con la capacidad de comandar monstruos normales", le expliqué. "La torre de Mercedes sólo tiene cinco pisos, así que sí, el hecho de que un guardián del piso tenga un piso para sí mismo no es tan sorprendente".

“Uhm… ¿entonces qué hacemos?” Elaine preguntó con curiosidad. "Creo que podríamos vencerlo, pero..."

"Nuestras armas se sienten mucho más restrictivas de lo habitual últimamente", habló Claudia mientras miraba sus dos espadas gemelas. “Ambos hemos crecido mucho durante estos dos meses. Nuestro equipo actual ya no nos conviene”.

Asentí con lo que esperaba que fuera una expresión de suficiencia en mi rostro. "Sí, pensé que algo así iba a suceder tarde o temprano". De hecho, acabo de regresar de la forja de Henry con sus nuevas armas. "Por eso los pedí hace como tres semanas".

Espadas gemelas hechas del núcleo dividido del Golem de Agadere... “Dawning y Duskyr, espadas largas gemelas que se pueden unir entre sí desde la parte inferior de la empuñadura. El negro es Dawning y el blanco es Duskyr. Son reflejos el uno del otro, destinados a usarse juntos en armonía. El uno sin el otro es débil, pero juntos y sólo estando juntos pueden brillar verdaderamente como el amanecer y el anochecer”.

También saqué al nuevo personal de su lugar. “Un bastón de diamante blanco para ti, Elaine, hierro y plata, ambos agentes que se dice que purifican la oscuridad y aquellos que se esconden en ella. El elfo que lo creó dijo que era particularmente fuerte contra los no-muertos y los espíritus, debería amplificar bastante tu magia blanca y llevar tu corazón bondadoso a través de las noches más oscuras.

Literalmente fui derribado cuando dos... mujeres muy pesadas me derribaron al suelo. "Ashur... realmente piensas en todo, ¿no?" Claudia no dijo nada más mientras presionaba sus labios contra los míos, su lengua se deslizaba contra la mía mientras mis brazos rodeaban su cintura, mientras la otra mano recorría el trasero de Elaine, apretándolo.

Claudia sólo se alejó porque no podía ignorar la necesidad de respirar. Sin embargo, Elaine fue lo suficientemente educada como para iniciar el beso con ella, una vez más, las lenguas se arremolinaron y bailaron juntas, pude sentir sus piernas patear hacia arriba, su espalda baja empujando su trasero hacia afuera contra mi mano mientras la baba corría por nuestras barbillas.

Me aparté para que Elaine pudiera recibir su propia dosis de aire en sus pulmones.

Apoyaron sus cabezas contra mi pecho jadeando suavemente como si se estuvieran recuperando de algo…

En realidad, es posible que me haya reprimido un poco menos de lo habitual, por lo que es posible que se estén recuperando de, ejem... el placer femenino.

Je… los hice correrse con una sesión de besos…

Claudia fue la primera en recuperarse, sentándose y arreglando su conjunto, lo que hizo que su pecho se tambaleara y rebotara, sí, disfruté cada segundo. “Estas espadas son hermosas Ashur. Dawning y Duskyr, ¿correcto? Estoy seguro de que se convertirán en socios valiosos en el futuro”. Elaine asintió, pero todavía estaba acostada, pasando un dedo por mi estómago.

"No estoy seguro de merecer un bastón así, pero... prometo que siempre lo cuidaré, Ashur".

Tarareé suavemente. "Eso es todo lo que puedo pedir... ¿ahora quién está dispuesto a patearle el trasero al guardián del piso?"

"¡Vamos a hacerlo!"

"¡Los apoyaré a ambos tanto como pueda!"

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Torre de Mercedes
~Tercer Piso~

Claudia y Elaine se miraron, sus nuevas armas en sus manos se veían bastante bien. Ambos parecían bastante confiados y ansiosos por superar la prueba que se propusieron. "Me uniré a ustedes dos en este caso, tengo curiosidad por saber qué tan bien mejoraron".

Por supuesto, sé lo bien que han mejorado sus estadísticas... pero quiero ver qué tan bien han crecido fuera de ellas.

"No te defraudaremos Ashur", comentó Claudia mientras daba el primer paso hacia el cuarto piso...

"Si no te importa que te pregunte, ¿quién es el guardián del piso?" Elaine preguntó con curiosidad, sus grandes ojos verdes me pedían una respuesta.

Sonreí un poco y me acaricié un poco la barba. “Es una Mantícora. Un monstruo con cuerpo y cabeza de león, alas de murciélago y cola de escorpión. Es bastante peligroso…. Si lo clasificaras como aventurero... entonces probablemente tendría el rango Verde. Sin embargo, soy fácilmente clasificado en índigo, y tanto tú como Claudia también estáis clasificados en verde. Los tres estaremos bien luchando contra eso”.

Bueno... fácilmente podría hacerlo de una sola vez si realmente quisiera... pero eso no permitiría que Claudia y Elaine crecieran adecuadamente.

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Torre de Mercedes
~Cuarto Piso~

"¿No es algo enorme?" Preguntó Claudia, agarrando sus armas un poco más fuerte ahora mientras miraba al guardián que teníamos delante.

"Oh, sí... y esto ni siquiera es su altura máxima". Respondí con una sonrisa. El bestiario del juego decía que las mantícoras podían crecer hasta alcanzar el tamaño de ocho vacas apiladas una encima de la otra. Esta era fácilmente dos o tres vacas como máximo.

Si bien no es el monstruo más alto con el que he luchado hasta ahora (el dragón de Agadere) es fácilmente uno de los más grandes que las chicas han visto.

"En realidad es solo un gato enorme con algunas características extrañas", hablé encogiéndome de hombros... "En realidad, probablemente no debería usar esas palabras exactas... resulta que adoro a los gatos". Me quedé un poco inexpresiva, ahora estoy teniendo dudas sobre lastimarlo... joder...

"Eso es realmente algo adorable..." Claudia comentó juguetonamente. "Entonces necesitaremos conseguir algunos gatos".

Elaine asintió, "No me importaría tener uno o dos... pero ¿no es mejor tener esta conversación más tarde, cuando no estemos a punto de luchar por nuestras vidas?"

No pude evitar reírme un poco. “Sí, probablemente… Parece que Mantícora también está cansada de esperar a que actuemos”. El monstruo parecido a un león rugió con cada fibra de su ser, el veneno babeaba de la punta del aguijón y sus alas batían amenazadoramente.