"Presagios supernaturales"

"Dios, ¿Estas ahí? Soy yo, Dean Winchester"

Me desaparecí un mes completo, pero el frio se vino con todo y con una fiebre que termino hasta con un herpes labial. En fin, ya regrese con un capitulo con la primera aparición de Castiel en Supernatural.
Disfruten el capitulo.

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- ¿Qué es lo que esta buscando a Dean? -pregunta Sam a la demonio Rubí frente a él.

- No lo sé, pero los altos mandos del infierno, no están furiosos, con lo que sea que se llevo a Dean del infierno-

El viento sopla fuerte, se rompe todo a su alrededor, los cazadores de demonios estaban listos para lo que sea que sea que trajo a Dean a la vida y esa cosa, había sido un ángel, en el cuerpo de un devoto creyente de dios.

Castiel se había echo finalmente presente en la vida de Dean, con lo que sería su última cara por conocerle.

Ellos disparan desesperadamente a Castiel con todo el armamento que tenían conocimiento, nada funciona, él continúa acercándose desatando el caos y la fuerza del cielo frente a ellos, hasta que queda frente a ambos sin inmutarse.

- ¿Quién eres? -pregunta a la defensiva Dean.

- Yo fui...-responde Castiel- el que te saco del infierno y te saco de la perdición.

- ¿Sí? - dice en tono sarcástico Dean- gracias por eso

Castiel da una pequeña sonrisa un tanto de alivio, aun tenia un poco de ese sentido del humor tan característico de él, de la misma manera, no se sorprendió cuando Dean lo apuñalo y este se sorprendió al ver que él no se inmutaba, lo saco consternado y lo tiro al suelo.

Por otra parte, su compañero, aquel hombre mayor intento atacar a Castiel y el le detiene en seco dando un toque con dos dedos en la frente, duerme al hombre, sorprendiendo a Dean.

- Necesitamos hablar...-dice Castiel mirando al hombre mayor- a solas...

Dean seguía consternado por lo que había visto que no podía reaccionar, Castiel le dio su tiempo y empezó a ojear los libros que Dean y su amigo tenían en aquel momento, Dean reacciono luego de varios minutos, solo mirando a su inconsciente amigo preocupado.

- Tú amigo está bien- dice Castiel ojeando las notas.

Molesto mira a Castiel: - ¿Quién eres? -

Sin mirarlo: - Castiel –

Un poco consternado: - Eso ya lo supuse, pero ¿Qué eres? –

Deja las notas y mira a Dean: - Un ángel del señor-

Incrédulo niega con la cabeza: - Eso no lo creo, no existen-

Una parte de Castiel, se sentía dolida, Dean había perdido tanta la esperanza de su propia vida, que cualquier luz en ella, la niega, lo niega a él.

Un poco serio: - Ese es tu problema Dean, no tienes fe-

De una forma u otra, Castiel haría todo lo posible por brindarle la fe, que tanta falta le hace, haría un milagro, un milagro infernal.

Dean se sorprende al ver las grandes alas negras a las espaldas de Castiel, de todas las cosas infernales que había conocido, jamás creyó que conocería las cosas angelicales, aunque nervioso se repone rápido para no retroceder frente a Castiel.

Un poco serio: - Vaya ángel que eres-dice en tono un tanto sarcástico- quemaste los ojos de esa pobre mujer.

Castiel baja la cabeza un poco avergonzado: - Le advertí que no viera mi forma real, eso puede ser abrumador para los humanos, al igual que mi voz real, pero eso ya lo sabes.