27 cm

DOS⛓

—¡Minhonie!—llamó Jisung mientras entraba al departamento de su novio.

—¿Que paso bebé?—preguntó Lee desde su sofá.

—¡No puedo creer que me hayas dejado con las ganas! ¡Eres un idiota!—Han hizo un puchero mientras se sentaba en el regazo de su novio.

—Te dije claramente que si te follaba en ese baño nos iban a descubrir, te recuerdo que todavía no puedes caminar bien cada que follamos, no me iba a arriesgar a que pensaran en ti desnudo—dijo Minho mientras posaba sus manos en la pequeña cintura de Jisung.

—Pero hoy es viernes, tenemos todo el fin de semana, yo digo que deberías de coger—río Jisung mientras quitaba la camisa de Lee.

—¿Estas seguro de que quieres esto? Se suponía que este fin de semana iríamos a la feria que llegó a la ciudad, si lo hacemos no podremos ir.

—No importa, quiero que me hagas el amor, así como a ambos nos gustas—Han comenzó a mover su trasero por encima de la tela que guardaba el miembro de Minho.

—J-Jisung...—Minho echo la cabeza hacia atrás mientras disfrutaba del movimiento de caderas de su novio.

Jisung bajo sus manos a la hebilla del cinturón del pantalón de Lee, para bajar el bóxer junto al matalon del contrario. Han se levanto para hacer lo mismo con su bóxer y pantalón.

Rápidamente Jisung volvió a acomodarse en el regazo de su novio con una sonrisa en su rostro mientras que llevaba su mano al miembro de Lee para acomodarlo en su entrada.

—¿Que estas haciendo? Te vas a lastimar Jisung, deja te preparo corazón.—lo detuvo Lee antes de que comenzará a ingresarlo dentro suyo.

—Con lo de esta tarde y antes de llegar me prepare, no te preocupes—mintio—déjame hacerlo esto, no habrá algún problema.—y con aquellas palabras Jisung comenzó a bajar por el miembro de Minho.

Jisung frunció el ceño mientras soltaba un quejido de dolor.

—Te lo dije, apenas entraste la punta y ya estás quejándote, ¿Por que eres tan testarudo?—suspiró Minho mientras acariciaba la cadera de Jisung.

—E-estoy bien...—gimió Jisung mientras seguía bajando.
—Te vas a lastimar, deberías de parar.

—Si pude en nuestro primer encuentro, ¿Cuál es la diferencia ahora?—interrogó Jisung, para luego tomar aire y de un solo movimiento meter el pene de su novio lo más que su cuerpo podía—O sea todo—.

Minho viro los ojos, sabía que sin importar lo que dijera, Jisung no le haría caso alguno.

Ambos se quedaron quietos, Minho no se atreveia a moverse ya que sabía que si lo hacia podía lastimar a su pequeño novio y eso seria algo que nunca se perdonaría. Y Jisung por su parte solo estaba esperando que el dolor bajara para comenzar a saltar sobre aquel exquisito miembro.

Después de aproximadamente 20 minutos—O si no fue más tiempo—Han comenzó a dar pequeños saltos sobre el miembro de su novio.

—Uhmm~—frunció su ceño mientras aumentaba un poco su movimiento de caderas.

—¿T-te sientes bien b-bebé?—preguntó Lee en medio de un gemido.

—S-si...demasiado...—y dicho aquellas palabras Minho lo vio en una señal de luz verde, para así comenzar a ayudar con las embestidas.

Las bolas de Minho golpeaban el gran trasero se Jisung, formando así un sonido de pieles obscenos mientras que el pene de Han golpeaba el abdomen de ambos.

Jisung paso sus brazos por el cuello de Minho para apegarse más a su cuerpo y que las embestidas aumentaran en su interior.

Lee paso una de sus manos en el vientre de Han, sintiendo así un bulto, Minho sonrió, pues le fascinaba sentir  su miembro en el abdomen de su novio.

—Honie...—llamo Jisung mientras volvía a mover su cadera lentamente.

—¿Que pasa bebé?.

—M-me canse, mis piernas perdieron fuerza—dijo mientras se separaba del pecho de Minho con un puchero en su rostro.

Minho dejo un beso en la frente de Jisung mientras que con cuidado de no lastimarlo se levantaba del sofá para dirigirse a su habitación; ya en ella acostó a Jisung en la cama mientras el seguía dentro de él y sin esperar alguna palabra de su novio comenzó a entrar y salir de él lentamente.

—¿Ya te sientes mejor?—pregunta Lee mientras aumentaba sus embestidas.

—D-de maravilla—Han arqueo su espalda debido al placer—Amo a tu miembro de verdad, es tan bueno—sonrió Jisung mientras mordía el labio de Lee.

—Yo se, yo se que lo amas y me lo recuerdas cada vez que estamos solos. Todos piensan que eres un santo, que como puedes estar con una bestia como yo, pero si supieran que eres tu el que me busca para destrozar tu trasero—hablo con aquella voz ronca que enamoraba a todos.

—Honie...—Han se mordió el labio mientras disfrutaba como su culo era maltratado por aquella cosa que su novio se cargaba entre las piernas.—Es que tu tercera pierna me trae mal—río Jisung.

—¿Así? ¿Tercera pierna?—Lee agarro las piernas de su novio y coloco ambas en su hombro para asi tener más profundidad dentro de aquel culo que amaba partir cada vez que se les daba la gana de tener sexo.

Jisung sonrió por la actitud que agarro su novio—P-parteme Honie, parte este culo que tanto dices que amas—gimió alto Han.
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Minho sin hacerse de rogar comenzó a cumplir con el capricho de su novio, aumentando cada vez más sus embestidas.

—M-me voy a correr Honie...

—Hagamoslo juntos bebé.

Dos. Cuatro y seis embestidas más faltaron para que ambos se corrieran, Minho en el interior de su novio y Jisung en el abdomen de Lee.

—Me encantó...—suspiraron ambos con la respiración agitada.

֍֍֍

Ya habían pasado dos semanas luego de haber tenido aquel encuentro sexual y se podría decir que Jisung terminó con un gran dolor en su trasero que no le dejaba caminar bien, pero que no le demostraba a aquellos idiotas de su universidad, no importaba que se estuviera muriendo del dolor, pero con todas las fuerzas de su cuerpo caminaba lo mejor que podía.

—Jisung—llamó Soyeon; la cual llegaba al lado de Felix.

—Hola—saludó Han mientras miraba con una sonrisa en su rostro a sus dos amigos.

—Tenemos una pregunta que no nos deja dormir tranquilos—soltó de una la rubia.

—¿Cuál?.

—Felix y yo nos dimos cuenta que andabas con dolores en tu trasero la semana pasada y que hasta el día de hoy todavía tienes, no es necesario que seamos adivinos para saber el porqué ese dolor.

Jisung estaba a punto de decir algo pero Soyeon le hizo un gesto de que todavía no había terminado.

—En la primera follada que tuviste con Lee, ¿Como aguantaste? O sea, todos sabemos la anaconda que trae en sus pantalones, queremos saber como no lo dejaste como todas lo hicieron tiempo atrás.—pregunto Felix mientras miraba a su amigo—Es que yo apenas y soporto el de Changbin que de cierta forma también es una anaconda pero no como el de tu novio, ¿Como es posible que sigas en pie?.

Han les sonrió un poco mientras que salía corriendo de allí, no les iba a decir algo tan humillante.

Sabía que sus amigos no dirían nada, pero hasta el día de hoy seguía sintiendo una gran vergüenza por aquello e inclusive todavía le daba pena recordar aquello, era vergonzoso pero a la vez muy gracioso, pero no se lo diría a sus amigos.