Yo, la estudiante nueva

El fruto de mi venganza

Paulina, cuando se entero, no se imaginan como reaccionó, bueno, puede que si. Un ogro no era nada al lado de ella, tenia una fueria que no se comparaba con nada.

Ella llego a mi puesto y me dio una cachetada, luego me dice:

Perra!!

Pero llega mi príncipe azul de la nada, obvio que hablo de Javier, que otro príncipe azul tengo?, bueno, el se pone adelante de mi, para protejerme y le dice a la estúpida de Paulina:

-Si le pegas o la molestas una vez más, te prometo, no, mejor, te juro que no te hablare nunca más!!

-Ya que tiene eso de malo? Y que me importa que no me hables?

-Te importa y mucho, porque yo te gusto, así es, lo sé, desde el año pasado, cuando yo y Elizabeth eramos novios, ella me lo dijo todo.

(Elizabeth era hija de un militar, por eso se cambiaba de colegio cada año, es decir, ya no esta en el colegio)

Ella ruborizada por la vergüenza, me miro y se fue corriendo y al mismo tiempo llorando, me dio un poco de pena, pero se lo merecía, se merecía que alguien le de una cucharada de su propia medicina.
Su seguito ahora me seguía a mi, ya que derote a su "reina".

Les enseñare a las chicas a jugar fútbol, ya que soy bastante buena en aquello.
En un par de semanas ya jugaban muy bien, tanto que en los recreos jugábamos contra los hombres, entre ellos estaba Javier.
Cuando tocaba el timbre de regreso a clases, Javier y yo nos íbamos de la mano, comiendonos con la mirada a cada rato.