📍: Academia Umbrella. (Cinco) Al día siguiente » [°°°]
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La noche de ayer no alcancé a cenar con mis demás hermanos, pero todo lo valió al compartir una linda salida con _______. Hablando de ella, me alegra sospechar que ella siente lo mismo por mi. Ayer se preocupó porque no cené así que los dos cenamos juntos en la cocina, entre risas y un hermoso ambiente.
Hoy me encontraba en la azotea en otra noche de Diciembre. Ya había empezado a nevar nuevamente y me alegra que haya sido en Navidad. Hoy no era una noche común...Hoy era LA gran noche. Colgué el último detalle importante que le daría el toque a esta velada y me escondí rápidamente al escuchar como abrían la puerta.
Era ______.
- ¿Cinco? Klaus me dijo que te sentías mal, que estabas delirando con un dragón morado que escupe arcoiris...
¿Dragón morado que escupe arcoiris?
Ese idiota no sabe decir nada bien.
- ¿Cinco? ¿Estás aquí?...Demonios.- jadeó sorprendida al ver la pequeña casita que había creado gracias a Luther y a Allison.
- ¿Te gusta?.- se volteó a verme ocasionandole más asombro.- Hola linda.- saludé con una pequeña sonrisa.
- Hola Cinco...Estás...Te vez bien.- soltó unas risitas. Creo que tal vez es por el traje de oso grizzly que traía puesto.
Quería algo único para este momento. Y al parecer lo estaba logrando poco a poco.
- Gracias.- me acerqué más a ella para notar lo más hermosa que se veía bajo la luz de la luna.- Un pajarito me dijo lo mucho que te gustan los osos de peluches.- solté una pequeña risita burlona.
- Fue Klaus ¿Verdad?.- ladee la cabeza en forma de asentimiento.- Estrellita me lo pagará y muy caro.
- ...No me gusta eso.- me miró confundida.
- ¿A ti no te gusta la venganza? ¿Qué le has hecho a nuestro Cinco Hargreeves?.- soltó burlona a lo que reí un poco.
- No me refiero a eso...A lo que me refiero es que no me gustas que para el si tengas un apodo y para mí no.- murmuré peligrosamente cerca de ella.
Maldita sea, debo quitarme de una vez esta traje. La cabeza pesa y pensé que estaría valiente aquí a dentro pero al parecer está más frío que el corazón de Diego.
- ¿Estás... celoso?.- rápidamente bufé.
- Claro que no.- negué con la cabeza a lo que se cruzó de brazos creyéndome poco.- Está bien, tu ganas. Ardo en celos cuando llamas a algunos de nuestros hermanos de forma muy cariñosa, que te toquen o que nuestros fans se te acerquen mucho. Me pongo celoso ya que yo no tenía esa misma suerte y me enojo tanto conmigo mismo por detenerme ante este sentimiento.- admití quitándome la cabeza enorme del oso de felpa.- Se que un perdón no arreglará todas las veces que te traté mal...Pero espero y me puedas permitir arreglar todos mis errores.- con una sonrisa alcé la mirada a lo que ella copió mi acción.
