Betty - Alex Walter

VIII. Gorgeous

Capítulo 8
Hermoso
And I'm so furious. At you for making me feel this way

Betty. 

Con Tamara nos estábamos arreglando para ir a la inauguración del Lark. Y yo no puedo explicar cuanto amo prepararme para ir junto a ella. Desde el momento en que comenzamos a planificarlo, la emoción se apodera de nosotras. Hay una energía única en el aire mientras nos preparamos para pasar un tiempo juntas.

Nos reunimos en mi casa, y el ambiente está lleno de risas y charlas emocionantes. La música suena de fondo, creando una atmósfera vibrante que nos contagia a ambas. ¡El guardarropa se convierte en un campo de juego! Compartimos prendas, intercambiamos ideas y consejos de moda. Siempre hay un momento de complicidad al elegir qué nos pondremos, con sugerencias entre risas y comentarios divertidos.

El ritual de maquillaje y peinado es otra historia. Nos sentamos juntas frente a un espejo, intercambiando productos, consejos y trucos de belleza. Es un momento de confianza y apoyo mutuo mientras nos arreglamos, animándonos y elogiándonos unas a otras.

El tiempo vuela mientras nos preparamos, pero eso es parte de la diversión. Cada una se siente más hermosa y segura a medida que nos preparamos para salir juntas. Y cuando finalmente estamos listas, ¡es una explosión de alegría y emoción! Nos miramos unas a otras, maravilladas por lo fabulosas que lucimos, y salimos lista para arrasar.

Arreglarse con amigas no solo se trata de vernos bien por fuera, sino de compartir momentos especiales, fortalecer lazos y crear recuerdos que atesoraremos por siempre. Es una combinación perfecta de risas, belleza y compañerismo que hace que cada ocasión sea inolvidable.

Cuando por fin estábamos listas, bajamos las escaleras y nos subimos al auto, esperando a mi padre sentado allí. Luego de al rededor de quince minutos, mi padre se subió al auto con una sonrisa. Nuestros rostros se iluminaron mientras entrabamos al Lark. Sonreí al ver lo hermoso que había quedado todo.

¡Guau! ¡No puedo creer lo que veo! Entré a Lark, esa acogedora cafetería, y me quedé sin aliento al ver cómo se transformó de día a noche. Las luces tenues y cálidas danzan sobre las paredes, creando un ambiente mágico. Los detalles brillantes resaltan la esencia acogedora del lugar, y las sombras se convierten en cómplices de esta belleza nocturna.

Las mesas, ahora iluminadas por velas suaves, parecen sacadas de un cuento de hadas moderno. Los murmullos de conversaciones animadas se mezclan con la suave música de fondo, y los aromas tentadores de café recién hecho y pasteles recién horneados flotan en el aire.

Las luces parpadeantes que adornan el techo crean un cielo estrellado propio dentro de estas paredes acogedoras. Y esos rincones antes discretos ahora se convierten en refugios íntimos, perfectos para compartir momentos especiales o para sumergirse en un buen libro.

Es simplemente asombroso cómo la atmósfera cambia por completo cuando cae la noche en Lark. Es como si cada rincón hubiera sido diseñado para deslumbrar bajo la luz de la luna. Sin duda, este lugar ha capturado la esencia de la magia nocturna y ha convertido una simple cafetería en un rincón encantador que invita a soñar y a disfrutar de la tranquilidad en cada sorbo de café.

Vi a Katherine a lo lejos, por lo que corrí a abrazarla con todas mis fuerzas.

—Betty —dijo ella mientras me sonreía.

Le devolví la sonrisa, tuvimos una pequeña conversación y fui a ver como estaban mis demás conocidos.

—Hola — saludé a Kiley con una sonrisa.

—Hola, Betty —dijo de igual manera —te abrazaría, pero —señalo la bandeja que tenía en su mano.

—Estás bellísima —dijo ella mientras me sonreía.

—Gracias, el peinado y el maquillaje es puro arte de Tamara —dije, causando que Kiley la buscara con la mirada. La encontramos peleando con Mateo cerca de la puerta.

—Iré a deterlos —dije mientras sonreír una vez más.

—Por favor, cuando terminen juntos fingimos sorpresa —dijo mi amiga, causándome una risa y despidiéndose.

—¿Saben? Dicen que los que pelean se aman —dije cuando llegue a su lado.

—No, nunca —dijo Mateo antes de irse con una cara completamente roja.

—Oye, no —dijo Tami mientras me sonreía levemente.

—Yo digo que sí, pero tal vez estoy loca —dije haciendo rey a mi amiga.

—Definitivamente, creo que estás loca —me respondió ella.

Mateo luego de diez minutos volvió acompañado de Alex.

—¿Jackie, no vino? —le pregunté al no notar a mi amiga por ningún lado.

—No, está castigada con Cole —dijo Alex.

Fue una noche increíble, todo salió según lo planeado. Amaba pasar tiempo con mis amigas, por lo que junto con Kiley iríamos a dormir a lo de Tamara.

Cuando estábamos llegando un mensaje de Jackie apareció en mi celular.

«Estoy enamorada de Cole Walter»

Solté un pequeño grito cuando lo vi, pero después caí en cuenta lo que realmente significaba eso.

Estaba quitando todo mi maquillaje junto a mis amigas. Tamara entró a la habitación con un paquete de galletas y una garra con agua. Le sonreí mientras tiraba otro algodón manchado con todo el maquillaje a la basura.

—¿Cómo va todo con Alex? —me pregunto con una sonrisa Kiley.

—Todo es fantástico cuando estoy con él, es como si supiera como hacerme sentir cómoda en todo momento —dije, sonriendo.

—¿Ya tuvieron un beso? —pregunto de nuevo Kiley haciendo que Tamara suelte una risa.

—Obvio que tuvieron un beso, si se la pasan a todo momento juntos —dijo Tamara con una sonrisa en la cara.

Voltee a verlas con una sonrisa, yendo a abrazarlas con una sonrisa.

—Lo bueno es que cada vez estás más cariñosa —dijo Kiley mientras aceptaba mi abrazo. Reí una vez más.