Cortejo

Quiero cortejar a su nieto

Aoi Kitahara había quedado prendado de la belleza del hermano mayor de su compañera de clase Iura-San, cuando lo vio por primera vez fue dos meses después de presente como alfa, le encantó el dulce olor a limón que desprendía él Iura mayor, por esa razón estaba ahí, un año después para pedir permiso para cortejar al único Omega de la familia Iura.

En la sala de la residencia Iura Kitahara estaba sentado frente al patriarca d ella familia y a su compañera.

-P-Puedes repetirlo, por favor?- pidió Makoto.

-Deseo el permiso de la familia Iura para cotejar a Iura Shuu - dijo sin titubeó alguno.

-Y que te hace creer que estoy interesado en entregar a mi nieto a un mocoso como tú?- preguntó mordazmente el alfa mayor.

-S-Señor, yo de verdad estoy enamorado de Shuu-San, prometo protegerlo y respetarlo, se que aún no acabamos la escuela pero prometo esforzarme para ser digno del cariño de su nieto-

-No me importa, Shuu es demasiado joven para tener pareja y tú solo eres un niñato - gruñó el abuelo para luego salir de la habitación.

-Has hablado con mi hermano de esto?- pregunto Makoto.

-No, aun no-

-Y entonces por qué pides permiso para cortejar lo si ni le has dicho que te interesa - regañó Makoto.

-C-Crei que sería lo correcto, para no ponerlo en una situación difícil -

-Antes de venir aquí, debiste consultarlo con Shuu, acaso estamos en la era feudal o en la era Teisho? Los omegas pueden tomar sus propias decisiones - regañó la peliverde.

-L-Lo siento-

-Ahora debes hablar primero con Shuu y después hablar con mi abuelo - aconsejo Mikoto.

La puerta fue abierta con brusquedad revelando al señor Iura con una katana desenvainada, mirando con furia a Kitahara.

-Si crees que te entregaré a mi Shuu estás muy equivocado niño- gruñó dando una estocada hacia el alfa menor.

- ¡Abuelo!- Mikoto estaba aterrada, sabía que su abuelo era protector con Shuu, pero nunca imaginó que a este punto.

Kitahara apenas logro esquivar la estocada, había visto a los hermanos Iura pelear con katanas cuando vino a esta casa por primera vez, pero no sabía que el señor Iura también pudiese usarla y tal parecía que era muy diestro en su uso.

-¡Vete, vete antes que te maté!- pidió Mikoto tratando de parar a su abuelo.

-Ya estoy en casa- saludo un alegre Omega peliverde acompañado por Yuuki y Tooru.

-Que paso?- pregunto la beta.

-Porque tú abuelo quiere matar a un niño de secundaria?- pregunto el alfa pelimorado.

-Shuu, que bueno que estás aquí, dile a este mocoso que se aleje de ti o lo mataré - dijo con severidad el señor Iura.

-Kitahara vino a pedir permiso para cortejar te- explicó Mikoto mientras Kitahara se cubría detrás de ella.

-Shuu - suspiro el alfa menor al ver a su lindo Omega.

-Cortejo? Permiso? Acaso estamos en la era Sengoku?- pregunto con diversión Tooru.

-Parece que Shuu es un Omega lindo y tierno- río Yuuki.

-Callense- ordenó Shuu sonrojado.

-Ves, mi nieto no te quiere, lárgate - bramó el abuelo.

-Abuelo, eso fue grosero- regañó Mikoto.

-Por favor que alguien le quite esa espada- pidió Kitahara.

-Eres un cobarde que no merece a mi nieto-

-No lo soy - se defendió.

-Eso fue estúpido, el abuelo fue campeón de esgrima a nivel nacional casi diez años seguidos - dijo Shuu al entender todo el contexto.

-Solo quería hacer las cosas bien- admitió sonrojado el alfa menor.

-Pero si parecía que pedías su mano en matrimonio - murmuró Makoto.

-Ni siquiera habías hablado con Shuu al respecto - dijo Yuuki.

Después de eunos minutos Kitahara se retiró de la residencia Iura con la esperanza de obtener una buena respuesta de parte de Shuu, ya que le dijo que lo pensaría y que tenía posibilidad de aceptar su propuesta.