Narrador Omnisciente
Su nombre era Estalinao Reyes, y tenía dieciséis años
¿Que si era un chico de problemas?
Sí, al igual que el chico que consideraba su mejor amigo, Percy Jackson
De doce años
Percy tenía malas calificaciones, bullies, lo normal
Estalinao tenía calificaciones regulares, bullies, lo normal
Y luego están las cosas cosas
Un maestro miró aterrado cómo un rubio de 7 años y un pelinegro de once años, estaban de pie cerca del borde de aquel edificio alto, con una sonrisa mirando a la distancia el techo de otro edificio aún más alto
El maestro, corría escaleras arriba para evitar que los niños cometieran una locura que acabara con sus vidas
Algunas cosas que quizá no sean tan normales.
Al llegar al techo, el maestro se quedó quieto, pensando en cómo acercarse a los chicos
El más alto, Estalinao, estaba tomado de la mano de Percy, ambos quietos en ese lugar, mirando aquel punto fijo
Percy estaba en segundo grado, y Estalinao en sexto grado, ¿Por qué estaban ahí arriba?
Ellos vieron algo
Al menos, podrían haber jurado que vieron algo
Cuidadosamente, el maestro los tomó de los hombros y los hizo girarse sobre sus talones, encaminándolos de vuelta dentro del edificio
Percy y Estalinao se miraron entre sí para luego volver a ver ese punto en específico
Del cual se veía un bello y oscuro pegaso
Pero cuando dices cosas como esas, terminas en la oficina de tipos como este
Percy y Estalinao se encontraban sentados uno al lado del otro frente al psicólogo escolar
Estalinao mantenía sus manos ocupadas con un cubo Rubik mientras su mirada vagaba por la habitación, pero escuchando lo que decía aquel adulto
Buenas noticias, no hay nada de qué preocuparse.
Todo está en su imaginación, pero si pasa de nuevo, deben contárselo a alguien
Estalinao y Percy se encontraban sentados uno frente al otro a la hora del almuerzo
Percy se encontraba dibujando una figura que veía desde la ventana de la cual estaban sentados a un costado
Estalinao estaba leyendo un libro que su hermano mayor, Jaime, le había dado
Era sobre cultura Mexicana, ya que tanto Jaime como él venían de México, pero cuando Estalinao era un bebé cruzaron la frontera para darle una mejor vida al chico
Volvió a pasar
Estalinao miraba de vez en cuando la ventana, viendo a lo que parecía un gran rinoceronte caminando entre las calles de la ciudad, una armadura al parecer amarilla rodeando su lomo mientras el gran animal caminaba entre los autos como si estuviese en su hábitat natural
