Bueno está es la historia de Lucas quien tiene 16 años pero que no tuvo la mejor de las infancias ni adolescencia, que luego de escapar de su casa puede encontrar digamos a sus angeles guardianes. Bueno hasta aquí espero que puedan disfrutar la hist...
*Narra autor* Se veía salir la luz del sol en la mañana cuando en la cama de Sara y Matías allí estaba el pequeño Lucas quien de a poco se iba acostumbrando a sus nuevos padres y protectores allí Sara lo despertó junto a Matías para que vayan a desayunar.
*Narra Sara* Sara: Lucas bebé ya es hora de despertar vamos a desayunar Lucas: mmm mami *estira sus bracitos para que Sara lo levanté* Sara accedió y lo llevo al comedor allí le hizo leche tibia y le dió con galletas de chocolate mientras que ella y Matías tomaban su café con tostadas y huevo revuelto ya cuando terminaron Sara levanto las cosas de la mesa y se llevó al baño a Lucas allí le quitó su pijama y su pañal lleno la bañera y le dió un baño Lucas estuvo jugando un rato con sus juguetes en la bañera ya cuando terminó de bañarlo lo envolvió en la toalla bata y lo llevo a su habitación allí lo seco le puso aceite de bebé le puso un nuevo pañal talco y un pijama de dos piezas color celeste con rojo luego Sara lo llevo a la sala y lo dejo jugando en con algunos juguetes hasta que tocaron el timbre portero Sara: hola si diga? Desconocido: hola si del correo vengo a dejar documentación del menor Lucas Sara: ah sí ya bajo Matías: que paso amor quien era? Sara: es del correo parece que ya llegó el DNI de Lucas Matías: okay ya bajo yo. Matías bajo y recibió el documento de Lucas ya cuando subió le hablo a Lucas Matías: Lucas bebé ven aquí Lucas: shi papi que paso? Matías: mira bebé aquí tengo tu documento ya eres legalmente nuestro hijo Lucas: siii que bueno Sara: bueno quieres saber cómo es tu documento? Lucas: sii Matías: bueno desde ahora eres legalmente Lucas Thompson nuestro pequeño hijo. Lucas no aguanto más y se largo a llorar Sara: que pasa bebé porque lloras? Lucas: es que pol fin tengo unos papis que me aman Sara: ay amor te amamos mucho *lo abraza* ven amor quieres ayudarme a armar el árbol de navidad? Lucas: sii si quielo siempre soñé con tenel una navidad Mateo: ay hijo lo siento mucho te prometo que tendrás muchas navidades más. Lucas abrazo a Matías y luego fue a ayudarme a armar el árbol de navidad el me pasaba los adornos y yo los ponía ya cuando termine de poner las esferas y eso Matías lo levanto a Lucas para que el ponga la estrella
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y ya luego terminamos de armar el árbol y quedó hermoso también decore la sala y el balcón ya luego nos cambiamos para la noche y nos pusimos a hacer la comida
*Narra el autor*
La pequeña casa de los Thompson resonaba con risas y la calidez de la temporada navideña. Lucas, el niño de dos años que antes fue un adolescente de 16, exploraba el mundo con ojos llenos de asombro mientras Sara y Matías preparaban la cena. Cada paso y risa de Lucas era un recordatorio constante de la maravilla y la inocencia que a menudo olvidamos en la rutina diaria.
Esta Navidad tenía un significado especial, no solo porque marcaba la celebración de la festividad, sino porque también representaba la primera vez que Lucas experimentaría lo que era la navidad. Sara lo abrazaba con ternura, y Matías jugaba con él en el suelo, creando recuerdos que durarían toda la vida. La transformación de Lucas, de un adolescente con las complejidades propias de esa etapa de la vida, a un pequeño ser lleno de curiosidad, era un fenómeno digno de asombro y reflexión.
Los familiares de Sara y Matías llegaron con alegría, completamente ajenos al misterioso pasado de Lucas. Intercambiaron abrazos, compartieron risas y disfrutaron de la magia de la Navidad con el pequeño miembro recién llegado a la familia. Los parientes, al ver a Lucas, no notaban nada fuera de lo común, solo veían a un adorable niño de dos años que llenaba la casa con risas contagiosas. La cena se sirvió con delicias festivas, llenando la casa con fragancias irresistibles. Mientras los familiares contaban historias de navidades pasadas y compartían risas, Lucas observaba con ojos curiosos, absorbiendo cada detalle de su primera experiencia navideña. Sara y Matías, conscientes de la peculiaridad de la situación, disfrutaban cada momento, agradecidos por la oportunidad de brindar a Lucas un hogar amoroso y una Navidad llena de significado.
El árbol de Navidad, adornado con destellos de luces y coloridos ornamentos, era el centro de atención. Los parientes de Sara y Matías, llenos de entusiasmo, comenzaron a entregar regalos envueltos con destreza. La alegría se reflejaba en los rostros de todos mientras compartían la magia de dar y recibir. Llegó el momento de los regalos para Lucas. Sara, con manos expertas, le entregó un paquete decorado con un lazo brillante. Lucas, con ojos centelleantes, agarró el regalo con sus pequeñas manos y lo sacudió con anticipación. La sala se llenó de silencio mientras todos esperaban la reacción del niño.
Con torpeza pero con determinación, Lucas desgarró el papel de regalo y reveló un suave juguete era un osito de peluche. Sus ojos se iluminaron con asombro y felicidad al descubrir la nueva adición a su pequeño mundo. Era evidente que este sencillo regalo tenía un significado especial para él, marcando no solo su primera Navidad, sino también su introducción al concepto de recibir un obsequio con amor y gratitud. Los familiares compartieron la alegría del momento, sin sospechar la historia única que Lucas llevaba consigo. La casa se llenó de risas, amor y la magia de la primera Navidad de Lucas como parte de una familia. Mientras disfrutaban de la cena, la charla y los juegos, la conexión entre ellos creció, tejiendo los lazos que hacen que una familia sea verdaderamente especial. A medida que la noche avanzaba, la atmósfera se impregnó de un sentido profundo de gratitud y aprecio. Los familiares, al principio desconcertados por la falta de detalles sobre el pasado de Lucas, se dieron cuenta de que la verdadera esencia de la Navidad no reside en los regalos materiales, sino en los lazos afectivos que unen a una familia. Sara, con una mezcla de emoción y nostalgia, miró a Matías. Sus ojos se encontraron, expresando la profunda conexión que habían formado con Lucas en tan poco tiempo. La historia única de Lucas solo añadía una capa más a la riqueza de sus vidas y a la comprensión de que la familia no siempre se define por la sangre, sino por el amor y la aceptación. A través de la ventana, la nevada empezó a cubrir el exterior con un manto blanco, añadiendo un toque adicional de encanto a esta inolvidable Nochebuena. El árbol de Navidad resplandecía en la sala, iluminando las sonrisas en cada rostro. Lucas, ahora envuelto en el calor del amor familiar, se quedó dormido con su nuevo juguete en los brazos de Sara, llevando consigo los sueños de un futuro lleno de amor y alegría. Y así, en la pequeña casa iluminada por las luces navideñas, la familia Thompson vivió una Nochebuena única y mágica, donde la verdadera esencia de la temporada brilló con luz propia, recordando a todos que el amor y la aceptación son los regalos más preciosos de todos.
Buenas aquí les dejo el especial de navidad tarde pero seguro xd que hayan pasado una feliz navidad y pasen un feliz año nuevo
