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Yo no elegí ser lo que soy, o tener el padre que tengo, yo no pude elegir las acciones de mi madre en el pasado, pero me gustaría haberlo hecho, ¿y que hubiera hecho?, bueno eso es sencillo: nunca me hubiese acercado a aquel tipo y nunca me hubiera ido al inframundo con él, ¿por qué fue con él?, precisamente con el dios más tenebroso.
Pero esto era algo que yo no sabía, algo que descubrí el día de mi cumpleaños número doce, ósea hace dos años, sin ninguna duda uno de los peores días de mi vida
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𝟔/𝟏𝟏/𝟗𝟗
Olympia se levantó de la cama dando saltos de alegría, ese día era su cumpleaños y lo celebraría con los señores Harper.
Ellos la adoptaron cuando Hades la abandonó en su puerta. Olympia bajo corriendo de su cuarto y llegó a la cocina dónde estaba la señora Harper preparando el desayuno mientras tarareaba una canción, Olympia se paró detrás suya y al sentir su presencia la señora Harper sonrió y se dió la vuelta.
-Buenos días, rayito de sol-dijo la señora dulcemente y se acercó a ella para darle un beso en frente.
-Buenos días-dijo Olympia con una dulce sonrisa.
La señora Harper sonrió. -Siéntate en la mesa el desayuno ya está listo -dijo y le sirvió un plato de tortitas.
Los ojos de la pelirroja se iluminaron y rápidamente cogió su tenedor para atacar las tortitas.
-¡Que ricas!-exclamó
La señora rió un poco, y negó con la cabeza.
Olympia también rió.
-¿Puedes hacer una tarta de manzana?-dijo Olympia -Seria un gran regalo de cumpleaños-dijo la niña con una sonrisita
-Haré dos-dijo
Los ojos de Olympia se iluminaron, se levantó de la silla y fue a abrazar a la señora.
-¡Gracias!-dijo mientras se aferraba a ella.
La señora Harper le acaricio el pelo.
-Es hora de que te prepares para ir a clase -dijo y Olympia asintió y fue corriendo a su cuarto a prepararse
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Olympia llegó a clase, y se sentó en su pupitre, en silencio, nadie hablaba con ella todos la tomaban por rara y loca, sólo por los dibujos que hacía, ella siempre pudo ver cosas.
Cosas que el resto de niños no veían, ella siempre supo que era diferente, y le encantaba, pero esto hizo que el resto de niños no le hablarán, era cómo un fantasma.
Olympia sacó de su mochila una libreta y un boli, el profesor aún no había llegado, por lo que podría dibujar un poco. La pelirroja, comenzó a dibujar a un pegaso negro, estaba muy concentrada en lo que estaba haciendo hasta que empezó a notar como algo golpeaba la ventana intentando entrar, Olympia desvío su atención a la ventana.
Y vio una figura negra y peluda, con una boca enorme y cubierta de dientes afilados, intentaba entrar.
Olympia se quedó helada, sin saber que hacer, tragó saliva e intentó ignorar lo que sucedía, hasta que la criatura rompió la ventana y entró a la clase, y se detuvo frente a Olympia, la chica soltó un gritó y todos la miraron, la pelirroja los ignoro
Olympia estaba asustada, se levantó de su sitio y empezó a correr lejos de la clase, el monstruo iba corriendo tras ella , la pelirroja era muy rápida y en cuestión de segundos, había logrado encerrarse en un baño, había logrado despistar al monstruo, o eso creía.
Después de unos segundos de silencio el monstruo entró e intentó atacar a Olympia, la chica cerró los ojos y apretó los dientes con fuerza, esperando lo peor.
Entonces alguien atravesó la cabeza del monstruo, Olympia levantó la mirada y vio como el monstruo caía al suelo.
Y vio como una chica con el pelo negro corto, ojos azules, y algunas pecas por encima de la nariz, estaba sacando la espada de la cabeza del monstruo.
—¿Estas bien?—preguntó la pelinegra, mientras limpiaba su espada
Olympia estaba en shock. ¿De donde demonios había salido esta chica?, ¿ cómo podía ver aquella chica el monstruo?,¿ y de dónde demonios había sacado una espada tan guay?.
La chica pelinegra la estaba observando, con una ceja levantada, algo confundida.
—Si—dijo Olympia al cabo de unos instantes
—Soy Thalia—dijo la pelinegra con una sonrisa
—Yo me llamo Olympia —dijo
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Este es el primer capítulo!!, muchas gracias por todo el apoyo 💞
