You're my special one

Unique

Todos alrededor de ChaeYoung o JiSoo sabían de la hermosa amistad que ambas tenían, eran completamente inseparables desde que eran pequeñas y la mayoría adoraba esa linda amistad. Pero cuando ambas comenzaron a crecer y comenzaron a hacer más amistades todo pareció quedarse simplemente en una amistad de la infancia, aún así ambas continuaban hablándose de vez en cuando y solían invitarse mutuamente a ver alguna película. Actualmente JiSoo había conseguido un trabajo de medio tiempo, por lo que su tiempo se veía realmente afectado por ello, ya no podía salir mucho y mucho menos ver a sus amigas. Aunque claro, allí estaba ChaeYoung siempre dispuesta a hablar al menos unos minutos con la mayor antes de que ésta entrara a su casa a descansar después de un largo día.

Durante un par de meses la amistad que inclusive ellas creían perdida se vió fortalecida por las pequeñas interacciones que habían comenzado a tener desde que la mayor comenzó a trabajar. Ahora ambas parecían las mismas niñas de diez años que eran inseparables y que estaban siempre juntas. Roseanne por su parte siempre acompañaba a la mayor a su trabajo e incluso la iba a buscar, en algunas ocasiones ésta se quedaba en una cafetería cercana esperando el horario de salida de la mayor.

JiSoo se sentía querida por la menor, y se sentía mal por el tiempo que habían perdido, pero ahora que podían recuperarlo simplemente se sentía feliz al saber que ese sentimiento de culpa sólo estaba en su cabeza. Kim tomó aire y su celular, mirando un mensaje de la menor que decía que esa tarde no podía ir a buscarla.

―¿Y esos ojos tristes?―preguntó JeongYeon mientras apoyaba su mano sobre el hombro de la más baja.

―¿Eh?―miró a la más alta, quién le dio una pequeña sonrisa― Sólo estaba mirando un mensaje, nada de ojos tristes―rió levemente.

―Ese brillito que tenías acaba de desaparecer por ese mensaje, ¿pasó algo malo?―preguntó con preocupación, al mismo tiempo que alejaba su mano del hombro de la chica.

―Nada malo pasó―volvió a reír- Sólo que Rossie me acaba de decir que no podrá venir por mí, pero tiene sentido ya que mañana es navidad y tiene cosas que hacer―se encogió de hombros.

Haré como que te creo, pero aún así sabes que no―rió, haciendo reír a JiSoo también.

―Todo está bien.

―Jichu~―canturreó NaYeon acercándose a ambas chicas―Esta noche iremos a cenar para celebrar navidad con las demás, ¿bienes?

―Claro -sonrió― Mientras no tenga que llevar regalos acepto.

La tarde de JiSoo se pasó entre quejas a sí misma por permitirse sentirse mal por un mensaje que no era malo, al mismo tiempo estaba pensando en si debía aceptar o no acompañar a las demás, realmente no tenía muchas ganas de salir pero tenía que aceptar que gracias a ellas sus días de trabajo eran más divertidos. En cuanto el horario de trabajo acabó, todas salieron juntas rumbo a algún lugar de comida mientras reían y fingían que era su último día de trabajo a pesar de que algunas de ellas al día siguiente debían volver.

La noche llegó entre risas y comida, mientras que ahora JiSoo estaba llamando un taxi para volver a su casa. En cuanto el taxi llegó y le informó hacia dónde debía ir, tomó su celular en el cual vió mensajes de Rosé quien se disculpaba y le explicaba la razón de su ausencia. Ella sólo respondió con un "está bien Rosie, no debes darme explicaciones" para luego guardar el aparato y sentir que su respuesta parecía que estaba molesta.

En cuanto llegó a su casa lo primero que hizo fue quitarse los zapatos para dirigirse a su habitación para por fin quitarse la ropa de trabajo y así sentirse más cómoda. Le hubiese gustado irse a dormir con un mejor sentimiento en su pecho, pero era inevitable sentirse de ese modo, aunque no supiera realmente la razón de ello.