教師 - Maestro

Origenes

?¿?¿: Esto es algo deprimente no crees madre? Porque estoy en este lugar para empezar?

Madre: tú mismo te buscaste estos problemas Julián, no saldrás de aquí hasta que demos con la causa de tu condición.

Julián: Es simplemente injusto! Solo porque hablo solo? Solo porque me siento cómodo en mi habitación con mis canciones?

Madre: a eso le llamas canciones? Esos ritmos melancólicos y deprimentes que escuchas? Y no es tanto porque hables solo, casi todos lo hacemos para aclarar ideas o simplemente porque tenemos que sacar algo de nuestra mente, ya sabes porque es solo mira tus brazos!

Julián: Ya te dije que fue un accidente mamá, el gato....

Madre: Que Gato ni que nada Julián, Mishi nunca haría algo como eso no me quieras ver la cara de tonta.

Julián: Venga va y por cuanto estaré en este manicomio? Cuanto es lo mínimo para estar aquí?

Madre: Agh*.... Lo mínimo son 12 días, pero me gustaría que estuvieras más tiempo para una evaluación correcta.

Julián: No depende de mi si estar o no más tiempo, eso depende de lo burro y bardo que sea el psiquiatra que me atienda en mi estadía en este lugar decrépito.

Madre: Prometes que te comportaras hijo?

Julián: Venga va, trataré, al final que es lo peor que me pudieran diagnosticar por las heridas ocasionadas por un gato?

Madre: Si ese fuera el caso no me vería en la obligación de traerte aquí, pero bueno ya tengo que irme, vendré de visita los domingos va?

Julián: Bueno al menos será razonable ver un rostro familiar cada 8 días porque por lo visto estaré aquí más de 12 días según lo planeado, cuídate madre y saluda a la abuela de mi parte me comportaré y saldré de aquí siendo un hombre nuevo, confía en mi palabra.

Madre: Te amo hijo y tranquilo que yo le dijo.

De esa forma madre se fue ese lunes aquella tarde lluviosa y yo me quedé en aquel psiquiátrico para mi evaluación de si era o no depresivo, aunque ya estaba más que claro pero madre quería la evaluación de un experto en él área, los días pasaron y simplemente me quedé en cama, comía y atendía las necesidades o preguntas que me hacía aquel doctor.

Psiquiatra: Hola Julián, como te encuentras hoy?

Julián: Diría que bien

Psiquiatra: Porque "Dirías" que estás bien?

Julián: <pensando> y aquí va de nuevo con sus preguntas... <le contesta al psiquiatra> diría que estoy bien pero realmente no es así, no tanto porque tenga pensamientos fatalistas o quiera hacerme daño de nuevo, porque hay que ser realistas la excusa del gato no sonaba para nada creíble verdad?

Psiquiatra: <entre risas pequeñas para querer alegrar el ambiente> jajaja, si tienes razón lo del gato fue algo ingenioso pero aún así dejando eso de un lado, cual crees que fue la razón que te hizo explotar de esa manera?

Julián: no se, podría deberse a que no se que rumbo tomar en mi día a día, solo... bueno únicamente estoy en la computadora a diario más de 18 horas, tener problemas académicamente y no cumplir con las expectativas de mi madre y darle el futuro que cree que merezco pero aún así hay otros factores que me agobian, uno de ellos puede ser que cuando no tienes con quien comentar lo que te pasa, lo que sientes, tus pensamientos, tus ideas... se vuelve agotador para el portador de los mismos.