2. ALLURA

13 1 0
                                    

<<Allura, la quintaesencia no forma parte del universo, es el universo>> <<Fluye a través de todos, pero solo algunos logran escucharla>> <<Existe en muchas formas y se manifiesta en otras tantas, debes aprender aceptarlas todas>>

<<Porque todas son igual de sagradas>>

<<La quintaesencia, puede usarse, para crear o para destruir, para la paz o para la guerra, lo conecta todo y a todos, pasado, presente y futuro, incluso a alteanos y galras>> <<Y aunque se me atribuye la creación de los Leones de Voltron, la verdad es que solo fui un instrumento que la quintaescencia uso para traer al exterior la forma que ya existía en el interior del meteorito>> <<Así que querida hija mía, permanece atenta, la quintaescencia te hablara algún día y tu deberás abrir tu corazón para poder escucharla...>>

<<Alfor, baja de una vez>>

<<Mira 'Llura, es tu Tio Zarkon, otra vez lo echaron de su propio palacio por odioso...>>

<<Alfor deja a la niña en paz, apenas tiene unos deca-pheobs, no te está entendiendo nada>>

<< ¿Puedes verlo? Su quintaesencia es igual de odiosa>>

<<Con un poco de suerte la pequeña princesa sacara más de Melenor y olvidara toda tu retorica mística...>>

<< ¿Me recuerdas porque seguimos siendo amigos?>>

<<Porque te salve la vida, muchas veces>>

<<Ja.ja.ja.>>



Padre

Padre

PADRE

PADRE

Y de repente la oscuridad absoluta se transforma de nuevo en luz, y ante sus ojos se e encuentra sostenida por un hombre joven de ojos violetas como galaxias y piel pálida.

Con su resplandeciente quintaescencia, como un sol rojo, fuerte, abrasadora, abrumadora, pero cálida.

Como la de su padre

<< ¿Quién eres tú?>>

Es ayudada a ponerse en pie, aun aturdida, lo escucha decir.

<<Soy Keith>>

Solo puede parpadear desconcertada por un par de segundos, entonces recuerda, su padre, su gente. Intenta caminar hacia la consola y sus piernas flaquean.

¿Cuánto tiempo estuvo dormida?

Espera volver al suelo pero es sostenida con firmeza y se le permite apoyarse en el costado del joven, es extraño, se siente cómoda, casi familiar. Vuelve a intentar caminar y esta vez, Keith se mueve con ella, apoyándola. Y cuando esta seguro de que puede sostenerse por si sola, da un paso atrás.

Cruzan miradas y lo ve inclinar la cabeza por un par de tics, una reverencia, un reconocimiento, aliento.

Regresa su mirada hacia la consola, encendiéndola, tarda un poco en procesar los datos.

Diez mil deca-pheob

Puede escuchar a Coran salir de su largo sueño, puede escuchar al resto de los seres en la bahía, hablan, pero no puede escuchar nada, es borroso.

Vrepit SaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora