¡Basta!
-¡Basta!
-Basta uno, basta dos, basta tres...
-Hablo en serio ¡Eres un tramposo!
-Amor ¡Claro que soy un tramposo! Tú me has dado este poder de convertir tus "no", en "si". Aunque ambos sabemos que solo son "si" disfrazados de "no".
-Siempre pasa lo mismo
-Dime ¿No eso es lo que quieres?
-Si, cariño, pero me molesta el hecho de que tú puedas conmigo, me pongo muy cariñosa y no soy así ¡Mira como está mi cabello!
-Se pone muy feliz de verme, me extraña mucho, incluso más que tú, según dices
-¡No te extrañé nada!
-¿Ni un poco?
-"Shi" poquito
-Me gustas cuando me miras así, y me hablas muy empalagoso.
-¡Eres un cabrón!
-¡Así como tú! A ti te encanta que lo sea...
-Me encanta que lo seas...
-Me encanta que nos encante.
-Me caes muy mal
-Es lo que veo, que te caigo demasiado mal
-Me gustas mucho
-A mí me gustas aún más
-Siempre ganas.
-Siempre ganamos.
Pero basta, por favor, me está matando recordar que por fin bastó y ahora te has ido.