"Formaremos una ronda y nos presentaremos para después lanzar los objetos." dijo animadamente la instructora.
Varios chicos y chicas se presentaron, ya casi era el turno de Joanna. ¿Qué se suponía que tendría que decir?
"Uh, soy Joanna." dijo mirando a todos. "Estoy aquí porque intenté suicidarme, larga historia." sonrió un poco. "Supongo que tiraré esto porque tiene muchas cosas de las cuales no quiero saber nunca más."
"¿Quieres contarnos algo más?" dijo la chica alentadora.
"Recibí un mensaje de texto, alguien quería que muriera. Sabía mi secreto. Supongo que quise hacer lo que decían. Ya saben, podrías desaparecer y nadie nunca lo notaría Hoeanna*." dijo recalcando lo último.
"¡Lánzalo!" gritaron todos.
Joanna hizo caso. Y se sintió un poco mejor.
(...)
"Hola, Joanna." sonrió un chico. "Soy Paul, estaba en la fogata." añadió.
"Hola." dijo apenas.
"Hey, todo saldrá bien. Ellos no lograron vencerte." sonrió. "¿Nos vemos por ahí?" rió.
Joanna también rió.
"Sí, nos vemos." sonrió y él comenzó a alejarse.
Joanna se sintió mejor, casi. Como si algo hubiese cambiado.
Joanna y Paul se vieron luego, y luego y luego.
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*Hoeanna: juego de palabras haciendo referencia a una puta (hoe).
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broken smiles
Short StoryLas sonrisas más brillantes pueden ocultar los secretos más oscuros.