⌗ ᴇɴᴀᴍᴏʀᴀᴅᴏ ᴛᴜʏᴏ 𓏲୧ ғᴜsʜɪɪᴛᴀ ˚∘܀

˚∘ ᴜɴ ɪɴᴠᴇɴᴛᴏ ɪɴᴛᴜʏᴏ 𓏲୧

Un nuevo alumno habia llegado a su colegio, por su presentacion se podia notar a kilometros su nerviosismo.

Su apariencia era extraña, tenia un cabello rosa palo.

Y lo que suponia que dejo encantados a todos era su encantadora sonrisa. Bueno no sabia que opinaban de el, pero solo suponia.

Y como si fuera un asqueroso cliche el unico asiento que quedaba libre era el que estaba al lado suyo, haciendo que el maestro le indicara al chico que se sentara a su lado.

- ¡Hola, me llamo Itadori Yuuji! - Hablo el chico casi gritando, haciendole irritar.

¿No se daba cuenta que estaban en clase?

- No grites. - Hablo con una voz haciendo callar inmediatamente al otro chico.

- Me llamo Megumi. - Dije con simpleza, sin agregar nada mas.

Haciendo sonreir al tal Yuuji.

- Un gusto Megumi. - Hablo el pelirosa sonriente, poniendo su vista al frente para poner atencion a su profesor gruñon y rubio.

El pelinegro repitio la accion del pelirosado.

Ya en el recreo se decidio a juntarse con su nuevo compañero, no sabia por que, pero suponia que era por que era amable.
No dejaria que pasara lo mismo que el en su primer dia de clases, sabia como eran sus compañeros con los nuevos.

Yendo a la direccion del chico se dio cuenta que estaba muy alejado de la realidad.

El nuevo estaba rodeado de personas.

Eso lo enojo.

Por celos...

Por celos de no poder ser asi, ¿Como podia ser asi de social?

Todo esto lo dedujo el mismo, igual no sabia por que le daba tanta rabia, ¿Le molestaba tanto que sus compañeros no hicieran eso con el?

¿Enserio ese era el causante de su rabia?

Tantas preguntas que tenia hasta que sintio unos toquesitos en su hombro.

- Megumi, Megumi, despierta. - Insistio ese chico con cabello "extravagante".

Apunto de contestarle escucho un insoportable sonido, la campana de entrada a clases, junto a los ruidosos alumnos.

Era un estupido, ni siquiera pudo desayunar por que inconscientemente se le quedo mirando por treinta minutos a un chico que apenas conocia.

Sintio que lo jalaban hacia la clase, no podia ni reaccionar por la velocidad en la que fue llevado.

Ya sentado en su silla sin saber como, volteo hacia Yuuji, dandose cuenta de su semblante brillante y tranquilo.

- Oye, Yuuji. - Susurro, no podia evitar sentir curiosidad hacia el, ¿Siquiera era un humano?

- ¿Que pasa, Gumi? - Respondio el pelirosado poniendole atención.

- ¿C-Como puedes correr tan rapido? - Genial, lo que le faltaba, ahora tartamudea.

- Solo se me da bien los deportes. - Dijo como si fuera lo mas normal del mundo, oyendo eso decidio no preguntar mas.

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Ese chico lo habia invitado a un parque para conocerse mejor, no tenia nada que hacer asi que solo acepto.

Nunca fue a un parque de diversion sentia miedo, todos los juegos que el pelirosa le habria propuesto eran peligrosos y extremos, rapidamente el se negaba haciendo al pelirosa sospechar.