𝑷𝒓𝒊𝒏𝒄𝒊𝒑𝒆𝒔𝒔𝒂 𝑺𝒍𝒚𝒕𝒉𝒆𝒓𝒊𝒏 𓆙 -En Edición.

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Nancy11
Marcus:13
Adrian:12
Lucian:12

La Carta!

No he podido dormir en toda la noche , bueno si dormí, unas 8 horas pero no fue suficiente para mi.

Me sente en mi cama, decidida a levantarme.

Mi hermano entro a mi habitación y me miro con una sonrisa.

-Tu carta -se sentó a mi lado con la carta en manos- "Estimada señorita Flint nos complace informarle que fue aceptada en el colegio Hogwarts de magia y hechicería. Las clases dan comienzo el 1 de septiembre. Debe estar en la estación Krin'g Cross antes de las 11:00 a.m" -sonreí y Marcus me abrazo.

Fue el mejor momento de mi vida.

-escucho Mr Pikles, voy a ir a Hogwarts! -abrace al escarbato y di vueltitas.

Marcus rio con ternura y luego salió de la habitación.

-lastimosamente no podre llevarte -dije triste- pero, nos veremos antes de navidad -bese su cabecita.

Callejón Diagon

-bien , niños vayan con Madame Malkin y luego por la varita de
Nancy , nosotros iremos por los libros, calderos y esas cosas -Hablo Mamá al llegar al Callejón Diagon.

Asentimos, nos dieron Galeones y se fueron.

-bien, ¿Chicos, podemos ir por mi varita primero? -pregunte dando saltitos de emoción.

-claro -Marcus beso mi cabeza mientras que Adrian reía levemente.

Tome los brazos de ambos y los hice correr hasta Ollivanders.

Al llegar los detuve antes de entrar.

-quiero entrar sola -estos se encogieron de hombros pero confundidos-. Me da pena que me vean, quédense aquí

Estos rieron pero, aceptaron.

Entre a la tienda y un señor apareció encima de una escalera.

-Señorita Flint, que gusto verla , ya la esperaba por aquí -hablo el señor con una pequeña sonrisa.

-hola señor Ollivander -salude.

-adivino, viniste por tu varita -dijo bromeando yo asentí mientras soltaba una risa-. Además de Mago, adivino -presumió y yo solo me limite a reír levemente mientras este caminaba por un pasillo. Luego apareció con tres cajitas-. Bien, una de estas puede que sea -dejo las tres cajitas a un lado , agarro una y la destapó para luego sacar una varita, tenía una piedra preciosa debajo , de decoración-. Prueba esta -extendió su mano con la varita.

La agarre , al agarrarle se sentía ligera y suave.

La agite un poco y unas cajas de las varitas cayeron, abrí mis ojos avergonzada.

-lo siento -me disculpe poniendo la varita en el escritorio.

-tranquila, pasa seguido pero, definitivamente no -dijo guardando la varita , acerco otra cajita y saco la varita.