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03-11-45  /  27-11-46 
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Ayer les habían dado la peor noticia posible, además de que su plan había sido descubierto y le rompieron la pierna a Emma, que pudieran haber recibido. Uno de ellos será despachado, Norman va a ser despachado.

« Tenemos que hacer algo, no te dejaremos morir. » Menciona la peli-naranja, por su pierna rota debía de estar acostada.

« ¡Si!, tiene que escapar antes de que le toque su despacho. » Apoya el azabache, no quiere saber que su mejor amigo, y enamorado, va a morir, que ya no lo va a volver a ver.

« Pero ¿y si mandan a otro en mi reemplazo? yo no quiero eso, Emma esta a salvo por su pierna pero ¿y los demás?, ¿qué pasa si mandan a Ray? se suponía que él sería el siguiente. » Comenta el albino, prefiere morir él antes de arriesgar a uno de los suyos, además si él no estaba mandarían a Ray, el no quiere eso. « Tengo que hacer que el vea algo maravilloso, tengo que lograr que no cumpla su idea. » Piensa con determinación.

Hubo un silencio abrumador, ninguno quería que él otro muriera, la idea era que nadie más muriera, pero ¿qué pueden hacer?, solo son niños en busca de libertad, en busca de salvar a los suyos, a sus seres queridos.

« ¿Y si le rompemos algo a Ray?, así él no podrá ser enviado, el estará a salvo, ambos lo estarán. » Siguiere con apuró la peli-naranja, no quiere perder a nadie más, no podría vivir con eso.

« Sí, yo me romperé el brazo, así no podrán enviarme, tu estarás a salvo, todos lo estarán. » Menciona el azabache en afirmación, tenía que sobrevivir hasta la madrugada de su cumpleaños, no va a aceptar ser comida para demonios.

« No, pueden enviar a otro, esto puede terminar mal, no voy a dejar que nadie sea despachado en mi lugar y Ray no se va a romper ningún hueso. » Dice con seriedad el albino, no van a entregar otra cabeza por la suya.

El silencio volvió, el azabache y la peli-naranja se miraron, ella vió esa chispa en el azabache, la chispa de un plan, uno que no sería del agrado de ella y menos del albino.

« Tengo que hacer algo, nos vemos en un rato. » Avisa con seriedad el azabache, no dió tiempo ni de preguntar, solo dijo eso y salio lo más rápido posible.

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Se escuchó como tocaban la puerta, fue a abrirla, podría ser algo importante que uno de los niños tendría que decirle, nunca se espero encontrar al azabache, a su propio hijo, el cual debe de estar enojado con ella.

« Así que el perro volvió donde su dueño. » Menciona con burla la peli-negra mayor, solo miraba a su menor con superioridad .

« ¿Me dejarás pasar o no? » Pregunta sin paciencia el azabache, no estaba para estos juegos.

La mayor simplemente se puso sería, eso fue atrevido por parte de su menor, lo dejo pasar. Cerró la puerta a penas el azabache ya estaba adentro.

« ¿Por qué estás aquí? te recuerdo que tú mísera ayuda ya no es solicitada, fuiste un perro útil pero a la vez muy estúpido. » Pregunta la oji-marrón, no va a andar con rodeos, es mejor ser directa, ir al grano.

« Gracias por los cumplidos, madre. » Menciona con falsedad el azabache. « Te pido que me envíes a mi en vez de a Norman, él no tiene la culpa de nada, ellos no tienen la culpa, es mía, yo los hice ver la verdad, castigame a mi, despachame a mí. » Pide el oji-verde bosque.

« ¿Qué?, ¿estás seguro? aún no...no es tu hora, ¿vas a cambiar su cabeza por la tuya? » Interroga la peli-negra, puede que no se note pero no quiere aún que su hijo se vaya.

Nothing to loseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora