No perteneces a nada tangible,
y tu señal nunca es entendible
no alteras ningún eje de mi vida,
tampoco eres una pieza pérdida.
Hueles a esperanza y cierta calidez
puedo decirlo tomando tu mano
segundos antes de verte partir,
como un cometa que pasa una vez
su estela dorada se vuelve nostalgia,
los esfuerzos dados son en vano,
Aún así, quisiera más de esa magia.
Preguntan las razones a alguien como yo
tan racional, tan milimetrado y estructurado,
te las diré: en un mundo de pasos planeados
eres esa pieza blanca que me ha liberado
de esconder emociones que he reservado
durante tanto creyendo haberlas olvidado.
No podemos pedirnos mutuamente quedarnos,
nuestras coincidencias no son largos acuerdos,
somos momentos que arden hasta extinguirse
trayendo después la penumbra de la soledad,
preparando los caminos que deben dividirse
repetidamente para poder recordar la felicidad
cuando las heridas propias creen nubes grises.
Querida pieza blanca sin ningún rol que ejecutar,
no tienes la condición de inspirarme o herirme,
este treinta de diciembre siempre lo atesoraré
como el día en que existimos en un eje similar.
Soñando, riendo, compartiendo hasta tropezar
tú tan perfecta quedando grabada en mi pensar,
Yo tan tímido que al irte ya no te pude besar.
Ojalá cumplamos nuestros sueños individuales
y permitamos convertirlos en historias duales
pero si no se dan las notas de esta composición
querida pieza blanca, gracias por tu participación.
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Tinción Desconocida (Poemario)
PoetryNuestros pensamientos y sentimientos están destinados a pasar por incontables filtros, bien sea de moral u inteligencia emocional para reducir su influencia sobre nosotros. ¿Qué pasaría si te dijera que los trozos de humanidad más puros yacen en est...
