Verboten

Capitulo 2

Cómo lo acordé con papá fui a ver departamentos después de la escuela, aún que no ví demasiados pues no tenía ganas de ver departamentos.
Me decidí por uno mediano, tenía una habitación de buen tamaño, un baño pequeño bien equipado, la sala, la cocina y una pequeña terraza en la que solo entraban algunas macetas.
Le avisé a papá cuál me gustaba he hizo el depósito y pago la primera cuota, el departamento venía ya con algunos muebles como una cocina integral pequeña, estufa, horno de microondas, sillones y ropero.
La mudanza y las compras de los muebles faltantes iba a ser tardío pero estaba dispuesta a esperar pues ya quería mi espacio, llegué a casa y saludé a mamá que estaba en su ordenador, no me prestó demasiada atención así que subí a mi habitación y me acosté en mi comoda cama, había Sido un día pesado me quedé profundamente dormida en cuestión de minutos.

-¡Alice, se te hace tarde!.-Grito mamá desde la planta baja.

Sentí que no había dormido una mierda pero ya era hora de levantarme, me puse la almohada en la cara y luego la lance. Me levanté arrastrando los pies y me vestí.
Baje corriendo las escaleras.

-Alice, te he dicho un millón de veces que no bajes corriendo las escaleras, te vas a caer.-Hablo en un tono de fastidio con los brazos cruzados.

-Si madre, lo siento.- dije y me senté en la mesa y mamá puso un plato de currywurst frente a mi, ella sabía que amaba esto y comí apurada.

-Come despacio te vas a atragantar.-Dijo ella con una sonrisa en su bello rostro.

Asenti y sonreí.

-Ya termine madre gracias, iré por mi mochila.- Dije sonriendo.

Subí las escaleras corriendo y tome mi mochila, me cepille el pelo y me puse algo de rimel y bálsamo en los labios, baje corriendo nuevamente para irme a la escuela.

-¡Alice Cameron Wells! Si vuelves a bajar o subir las escaleras corriendo te daré una lección.-dijo notoriamente molesta.

-Lo siento madre, te quiero.- dije y bese su mejilla.

Salí de casa y me dirijí hacia la estación de autobuses, llegó rápidamente así que me subí y me senté en cualquier lugar mientras iba conectando mis audífonos a mi MP3, me acomode mientras iba escuchando
what you want de evanescence. Llegué a la escuela con tiempo pues quedaba a 20 minutos de mi casa y a veces me hacía más tiempo así que llegue 20 minutos antes de la hora de entrada pero la escuela ya se encontraba abierta, entre y me dirijí a mi edificio, iba caminando por los pasillos y había una puerta entre abierta y dos personas discutiendo.

-No me puedes hacer esto.- decía la voz de una mujer que por cierto me sonaba familiar.

-Entiende, has esto más fácil para ti y busca a alguien más ¿Puedes?.-decia una voz masculina con un notorio fastidio que no lograba distinguir.

La puerta se abrió completamente de golpe y de ella salió la señorita Miller, se veía molesta pero al instante que me vio cerró la puerta detrás de ella y se veía asustada.

-¿Escuchaste algo?.- dijo en un tono sumamente nervioso.

Negué con rapidez.

-Apenas desconecte mis audífonos la vi saliendo del salón.-Menti

Ella suspiro aliviada y me regaló una sonrisa.

-Buenos días por cierto, ya me voy, tengo una clase que preparar.- Se excuso y se fue sin esperar respuesta mía.

Tenía intriga de saber con que hombre hablaba ella, más por qué ella ayer llegó extraña y por qué la voz masculina me sonaba de algo, sin más me fui a mi salón y no era la primera, había un grupo de chicos en bola y estaban hablando de la novia de uno, no preste mucha atención pues estaba pensando en lo sucedido.