Te odio tanto osamu

capitulo 11

La vida de chuuya podría tomarse como si estuviera "de vuelta a la normalidad¨ Dazai volvia a su trabajo mientras que chuuya cuidaba a los hijos que ambos compartían, los dias pasaban y eran extrañamente normales, no tenia tanto estrés como antes pero si tenia un extraño sentimiento, ese sentimiento de soledad había vuelto y nadie podia quitarlo, ese sentimiento era como una droga, se aferraba a el sabiendo que este le hacia daño, no podia evitarlo, su cuerpo y su mente se aferraban a aquello, cada dia sentia mas asco por su propio cuerpo, el hecho de que por su embarazo hubiera subido unos cuantos kilos lo mataban poco a poco, se sentia asqueroso, sentia repugnancia cada que miraba su cuerpo en un espejo, sus caderas se habían hecho ligeramente mas anchas, varios de sus musculos habían desaparecido, había subido unos cuantos kilos y eso era lo que aborrecia, desde cuando paso a tener tanto ego sobre su propio cuerpo a sentir asco puro cuando lo miraba el hecho de que su cuerpo hubiera cambiado le aterrorizaba, ¿y si a Dazai le molestaba su cuerpo? en la calle habian demasiadas mujeres y hombres tanto omegas y betas que lucian mucho mejor que el en este momento, tenia miedo a que ese sentimiento tambien pasara por la mente de dazai cuando lo mirara, le daba miedo la idea de que el solo mirarlo le provocara asco, muchas veces en le pasado le habia aclarado que lo que mas le gustaba era su cuerpo

Desde el momento en el que Daza lo había dejado de tocar su inseguridad aumento de sobre manera, tenia miedo, cada vez su tacto se reducía mas, pasando de unos cuantas noches donde ambos disfrutaban, a solo caricias y besos subidos de tono, cada vez mas reducidos a unos besos y caricias rápidos a solamente besos o menos que eso, siempre que dazai lo miraba este volteaba la mirada haciendo pensar que le repugnaba su cuerpo. Se repetia asi mismo que no era nada grave aunque el mismo se maldecía por esto, en que momento se podia avergonzar, cada dia se comenzó a pesar, salia de correr para intentar bajar su peso, el ya no tenia su cuepo perfecto tal vez... dazai necesitaba bajar sus expectativas

No recuerda el momento donde lloraba con tan solo ver a algunas chicas comiendo lo que les apetecia mientras el se moria de hambre para tener el cuerpo que a su esposo de gustaba, le dolia el alma,

el si contaba sus calorias

Chuuya miraba en su telefono las fotos de varios famosos con el cuerpo que el deseaba, que le costaba al universo dejarlo ser feliz tan solo un momento, tal vez si se ponia lindo le gustaría mas a dazai, decían que la belleza hacia a los hombres felices

No recordo el momento en el que lagrimas salian de sus ojos corriendo por sus mejillas, estaba en el sofa de su sala, se maldecia asi mismo por no poder ser lo suficientemente bueno para dazai, abrazaba con fuerza uno de los cojines grises que estaban en el sofa, mientras sus lagrimas quedaban en ese pequeño cojin como una muestra de su momento de crisis por su falta de autoestima, en un momento sintió un ligero tacto en su cabeza, congelandose en su propio lugar, sus lagrimas seguían saliendo sin para en algún momento, Alzo ligeramente su cabeza observando a aquella figura alta de cabello castaño y ojos carmin observandolo directamente, su uniforme habia cambiado desde que Mori se tuvo que jubilar por su propia edad, no había cambiado mucho, se parecia a Mori y podia jurar que se parecia bastante a Mori en este momento

- Deja de mirar esas cosas -dijo serio- solo te haces daño - quitandole el celular de sus manos mientras lo apagaba y lo dejaba en la pequeña mesa que estaba en la sala, dijo sentandolo en su regazo mientras apoyaba la cabeza en su pecho y acariciaba los mechones del pelirrojo sintiendo que se sentian mas suaves que de costumbre, empezando a examinar con sus propias manos el cuerpo de chuuya dandose cuenta de la perdida de peso que se notaba tan solo con tocarlo y cargalo- Chuuya, no haz estado comiendo bien verdad?

- es que... -su voz salio cortada, sus ojos estaban lagrimiantes, las lagrimas bajaban por sus mejillas las cuales estaban ligeramente rojas por el llanto apetando la camisa de dazai mientras mas lagrimas salian por sus ojos empapando la prenda del castaño- ellos son... mejores que yo, tienen mejor cuerpo y...