Una despedida...?

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Pov's Akutagawa:

El suave golpeteo de la lluvia en la ventana despertó a Akutagawa de su descanso. No sabía cuánto tiempo había dormido, pero su cuerpo aún se sentía pesado. Sus pensamientos seguían anclados en la noche anterior, en el calor de los cuerpos y la mirada intensa del pelinaranja. No podía dejar de pensar en él, en sus movimientos decididos y en cómo lo había hecho sentir. La advertencia de Mori seguía flotando en su mente, pero decidió ignorarla.

Se levantó lentamente, su cuerpo quejándose con cada movimiento, y miró el vaso vacío en la mesita de noche. Necesitaba salir de la cama, moverse. Sin embargo, algo en su interior lo mantenía atado a la sensación de la noche pasada, una mezcla de deseo y curiosidad que no podía sacudir. Suspiró y se dirigió al baño, decidido a despejar su mente.

Mientras se lavaba la cara, sus pensamientos volvieron al pelinaranja. ¿Quién era realmente? ¿Debería intentar encontrarlo? Akutagawa se miró al espejo, observando su reflejo. Sabía que Mori tenía razón al advertirle, pero algo lo empujaba a desobedecer. Quería más respuestas, y en el fondo, anhelaba otra oportunidad de verlo.

Pov's Chuuya:

Chuuya lanzó una risa nerviosa mientras Verlaine lo miraba con una ceja levantada, esperando una explicación más detallada. Pero antes de que Chuuya pudiera decir algo más, alguien interrumpió la conversación. Un hombre alto, de complexión fuerte y cabello oscuro, entró en la habitación con una expresión seria.

—Chuuya, ¿qué demonios estabas haciendo anoche? —dijo con voz grave. Era su amigo de confianza, Kouyou, que se había enterado del incidente.

—¡¿Tú también?! ¡No fue para tanto! —respondió Chuuya, frustrado. Sentía que todos lo estaban acosando por lo que había sucedido, pero para él, solo era una anécdota más. Sin embargo, lo que realmente le importaba era Ryu.

Kouyou lo miró con incredulidad. —¿Correr desnudo por la ciudad no fue "para tanto"? ¿Y qué me dices de la policía? He escuchado que algunos oficiales están investigando los incidentes de anoche, y no me sorprendería que te busquen.

Chuuya bufó y desvió la mirada. —No importa. Lo único que quiero saber es cómo encontrar a Ryu otra vez.

Verlaine y Kouyou intercambiaron miradas preocupadas. Sabían que cuando Chuuya se obsesionaba con algo, no descansaba hasta conseguirlo. Y esta vez, parecía que se había metido en algo que podría complicar su vida más de lo que imaginaba.

—Chuuya, escucha —dijo Verlaine, suavizando su tono—. Entiendo que estés interesado en este tipo, pero deberías tener cuidado. No sabes realmente en qué te estás metiendo. Si Mori te corrió de su casa, debe haber una buena razón.

—No me importa —respondió Chuuya, obstinado—. Voy a encontrarlo, cueste lo que cueste.

Kouyou suspiró. —Entonces será mejor que no hagas más locuras por las calles. Tienes suerte de que no te hayan arrestado. Y si de verdad quieres encontrar a ese tal Ryu, lo haremos de manera inteligente. Dejemos de lado las tonterías y pensemos en cómo acercarnos a él sin causar un escándalo.

Chuuya asintió, aunque su mente seguía revoloteando en torno a los recuerdos de la noche anterior. Había algo en Akutagawa que lo fascinaba, algo que no podía ignorar. Mientras sus amigos seguían discutiendo sobre planes y precauciones, Chuuya solo pensaba en una cosa: volver a ver esos ojos fríos y esa expresión imperturbable. Sabía que debía ser más prudente, pero lo que sentía por ese misterioso azabache era algo que no iba a dejar ir tan fácilmente.

Pov's Akutagawa:

Era otra noche solitaria para Akutagawa, aunque su "papá", Mori, intentaba ayudarlo a divertirse. No fue hasta que Gin y un amigo suyo, Atsushi, lo animaron a salir de su cueva que finalmente accedió. Obviamente, el azabache fue obligado. Solo se vistió con unos pantalones holgados y un pequeño top que dejaba ver su abdomen tonificado, junto a una polera ligera.

Aquel lugar era demasiado grande para él, y se sentía un poco inseguro. Después de todo, nunca había asistido a un evento así, excepto por trabajo. Decidió tranquilizarse, así que les dijo a sus amigos que iría un momento al baño. Mientras se miraba en el espejo, se preguntaba... ¿Dónde estarás?

De repente, sintió a alguien tomarlo del brazo y luego sujetarlo de la cintura, quedando sorprendentemente cerca del rostro de un "desconocido". Era el pelinaranja.

—¿Qué estás haciendo aquí? —preguntó el azabache, aún sorprendido.

—No podía dejar de pensar en ti. Te vi entrando al baño y decidí simplemente tenerte de nuevo entre mis brazos... ¿Acaso te desagrada? —dijo, mirándolo con ojos llorosos.

Ante esto, Akutagawa no pudo resistirse. Simplemente dejó que el contrario continuara con el agarre, pero ahora él se ocultaba en su pecho, susurrando:

—Yo también pensé en ti, pero... podrías salir perjudicado por mi culpa si nos ven juntos.

El azabache sentía una mezcla de ansiedad, miedo y un poco de tristeza. Sin embargo, esos sentimientos se desvanecieron cuando el pelinaranja tomó suavemente sus mejillas, lo miró directamente a los ojos y lo besó. Luego, le dijo:

—No me importa si mi familia no nos acepta, solo necesito estar a tu lado para sentirme completo.

Chuuya quedó recostado sobre su hombro, sonriendo, hasta que escucharon la voz de Verlaine, molesto, buscándolo por todo el bar. Ahora sí estaba en problemas.

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Muchas gracias por el apoyo a esta historia , no puedo creer que haya llegado a más de 100 estrellas. 

Los adoro , cuídense. 💖

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⏰ Última actualización: Oct 10 ⏰

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Trabajo Nocturno ºAUº (CHUUAKU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora