The Heavenly Dragon - Edward x MReader

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Tres días habían pasado desde entonces, los hermanos en esos días nunca faltaron a las carreras ilegales a las cuales también se unieron siendo parte de la gente de su amiga Lili. Edward en esos días no se rindió en su búsqueda, con ayuda de su don trato de hallarlo pero sentía que no llegaba a nada hasta que lo vio.

En la mente de una chica de baja estatura y rasgos latinos apareció el coreano, el cobrizo no pudo estar más feliz. Con sigilo empezó a seguir a la chica y así llegaron al lugar donde se llevarían a cabo ese día las carreras.

Entonces lo vio a lo lejos , el coreano llevaba una camiseta negra que hacía lucir sus fuertes brazos y esa piel ligeramente bronceada, al quedar embobado con el no se dió cuenta que alguien se acercaba a el pegando un pequeño brinco cuando lo tocaron del brazo.

-.¿Te gusta lo que ves?- Diana había ido por su amigo Miguel cuando vio al vampiro y no dudo en acercarse a él.

-.No se de lo que hablas.- dijo para salir deprisa de ahí.

-.asi que impronta vampírica, nada mal.- fue lo último que dijo para ir con su hermano.

Edward no se había alejado mucho para poder observar a los dos coreanos, Johan sintió la pesada mira del vampiro sobre el y lo voltio a mirar, negro contra dorado  en una batalla que parecía no tener fin.

-.¿Pensé que no te llamaba la atención?- hablo Diana con una sonrisa burlona, Johan por su parte no aparto la mirada en ningún momento.

-.Johan, ya es tu turno-. La latina se acerco con su pareja que era Miguel a los hermanos.

-.En un momento voy-. Dicho eso aparto la mirada para caminar dónde se encontraba su auto ya listo para iniciar, se subio y entre la multitud vio al chico pálido, no lo quería admitir pero lo quería impresionar.

-.Amigo no te quiero poner un peso encima pero la apuesta es por los autos-. Apretó el hombro del coreano en forma de apoyo -. Así que más vale que no pierdas.

-.Yo nunca pierdo-. Dijo Johan.

Edward miraba con atención a los autos que corrían pero uno en especial era el que le interesaba, no pudo contener la emoción cuando el chico ganó y con un poco de vergüenza por su reacción se alejo de las personas pero sin dejar de tener a la vista a su compañero pero de un momento a otro ya no lo vio.

-.Ey, que tal la carrera-. El vampiro al escuchar esa voz de nuevo hizo que su cuerpo se estremeciera, lentamente se voltio y lo miro , tan guapo como el primer momento en que lo vio.

-.¿Te gustó?-. Dijo Johan mirando con una ceja alzada al vampiro.

-.Si me gustas -. Edward se dio cuenta de lo que dijo sin pensar y salió corriendo.

Johan quedó confundido por sus acciones, algo dentro de el sé sintio cálido cuando le dijo que le gustaba.

-.No lo dejes ir animal-. Diana llegó llamando su atención.- vamos con el .

-.Pero no va a querer hablar con nosotros-. Diana ante su reclamo lo jalo del brazo para comenzar a caminar.

Entre quejas del pelinegro dragón su hermana aplicó más fuerza en el para llevarlo con el vampiro, lo buscaron por unos minutos cuando lo hallaron en un lugar donde había muy poca gente y los carros tapaban la mayor parte de la vista.

-.Chico con pelo de escoba-. Diana reforzó su agarre en el brazo de su hermano para que no se fuera y lo mismo hizo con el vampiro al ver sus intenciones de irse otra vez.
Edward se sorprendió al no poder sacarse la mano de la chica.

-.¿Cómo te llamas?-. Edward la quedó mirando con una cara de molestia, Johan solo pido pensar en lo lindo que se miraba el chico con esa expresión.- Que descortés de mi parte, nos presentó.